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Es el segundo Boeing 777 de Malaysia Airlines que se estrella este año. | Foto: RT.

CATÁSTROFE

La doble tragedia de una familia australiana

Una mujer que perdió a un hermano y una cuñada en el vuelo MH370 se enteró que su hijastra viajaba en el avión que se estrelló en Ucrania.

Alianza BBC
18 de julio de 2014

El vuelo MH17 de Malaysia Airlines que cayó sobre la conflictiva zona en el este de Ucrania llevaba a bordo personas de todas las nacionalidades, profesiones y ocupaciones: desde un destacado investigador del VIH/sida y aficionados al fútbol, hasta una monja y una diseñadora floral.

Para las familias y allegados de ellos, la angustiosa espera de la confirmación de que, en efecto, iban a bordo de la nave siniestrada debió ser insoportable.

No obstante, para una familia en particular, la noticia de la muerte de sus seres queridos en el vuelo MH17 no solo representó una increíble tragedia doble sino una macabra coincidencia.

Hace poco trascendió la historia de una familia afectada por las dos tragedias aéreas de Malaysia Airlines: la que acaba de ocurrir con el vuelo MH17 y la sucedida en marzo en el Oceáno Índico con el MH370.

Kaylene Mann, una mujer australiana que perdió a su hermano y a su cuñada –Rod y Mary Burrows– en el accidente de hace cuatro meses, se enteró este viernes de que su hijastra, Maree Rizk, se encontraba entre las víctimas fatales de la aeronave que se estrelló en Ucrania.

Su hermano, Greg Burrows, dijo que la familia no podía creer ni aceptar su destino: "(Kaylene) perdió a su hermano y ahora a su hijastra... Estamos destrozados otra vez".

Rizk, originaria de Melbourne, volaba de regreso a casa de unas vacaciones de cuatro semanas a Europa. La acompañaba su esposo, Albert, miembro del comité del Club de Fútbol Sunbury de Australia.

Phil Lithgow, presidente del club, confirmó el cargo de Albert Rizk y explicó que Maree trabajaba de voluntaria en la cafetería del club, mientras que el hijo de los dos, James, jugaba en el equipo.

"Eran personas adoradas, no había quién dijera algo malo de ellos y muy generosos con el tiempo que le dedicaban a la comunidad", expresó Lithgow.

Aunque la información inicial indicaba 280 pasajeros y 15 tripulantes a bordo del Boeing 777, lo cierto es que en el accidente se perdieron 298 vidas, entre ellas tres bebés.

Según explicó en el aeropuerto de Ámsterdam Schiphol el vicepresidente en Europa de Malaysia Airlines, Huib Gorter, más de la mitad eran holandeses: al menos 173.

El resto eran australianos (27), malasios (44, incluyendo 15 tripulantes), indonesios (12) y británicos (9).

Luto en Holanda

Con 154 muertos, Holanda fue el país con más víctimas. No en vano, declaró un día de luto nacional.

El rey Guillermo Alejandro se mostró "profundamente entristecido por la horrible noticia".

"Nuestro pensamiento está con la familia, amigos y compañeros de las víctimas y de los que no saben todavía si sus seres queridos estaban a bordo del avión", dijo el monarca en un comunicado.

También se pronunció el primer minsitro del país europeo, Mark Rutte, quien dijo estar "profundamente golpeado" por la catástrofe.

En el aeropuerto, se vio llegar a compungidos familiares, quienes inmediatamente fueron llevados a un espacio habilitado en un bar, lejos de la prensa. Luego fueron subidos a unos autobuses sin que su destino se hiciera público.