Desfile del orgullo gay en medio del luto

Un año después de que el exultante desfile del Orgullo en la ciudad de Nueva York celebrase un hito para los homosexuales con la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo en todo el país, la atmósfera en torno a la marcha de este año no podría ser más diferente.

Los desfiles del domingo en Nueva York, San Francisco y otras ciudades se preparaban dos semanas después de que una discoteca gay en Florida se convirtiera en la escena del tiroteo masivo con un único tirador más mortal en la historia moderna de Estados Unidos.

Las celebraciones organizadas en torno a temas como el apoyo a personas transexuales o la justicia económica cobraron rápidamente un nuevo significado. Los asistentes a los desfiles verán más seguridad, mensajes contra la violencia y homenajes a los fallecidos en Orlando.

Pero los organizadores no quieren que la masacre apague la desafiante exuberancia de las celebraciones, que se basan en declarar que los homosexuales no tienen miedo de que se les vea y se les oiga.

"El año pasado fue un momento de mucha celebración, y este año pasa esto", comentó James Fallarino, portavoz de los organizadores del desfile neoyorquino, uno de los más antiguos del país. "Pero por eso es tan importante que estemos fuera, ruidosos y orgullosos".

"Si cambiamos nuestro evento, si hacemos algo más sombrío, es en muchas maneras, permitir que ganen aquellos que quieren silenciarnos", afirmó.

Los desfiles del domingo sí tienen un nuevo hito que celebrar: el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, designó el viernes la zona en torno al Stonewall Inn de Nueva York como el primer monumento nacional a los derechos homosexuales. Una redada policial en el bar en 1969 ayudó a canalizar el movimiento en defensa de los derechos de los homosexuales.

En cualquier caso, los desfiles, a menudo estridentes, se verán compensados con mensajes de respeto y pesar por los 49 muertos y más de 50 heridos en Orlando.

Aún no está claro, y puede que nunca se sepa, qué provocó exactamente la matanza perpetrada por Omar Mateen. EN una llamada al 911 dijo pertenecer al grupo Estado Islámico, mientras que su exesposa dijo que sufría problemas mentales y su padre sugirió que podría estar molesto con los homosexuales.

Fuera cual fuera el motivo, Mateen atacó un popular club gay y las celebraciones de todo el país sienten un aumento del riesgo. La policía en la zona de Los Ángeles detuvo a un hombre fuertemente armados que dijo a los agentes que iba hacia un gran desfile del orgullo en West Hollywood.

Las autoridades de Nueva York, San Francisco y Chicago han anunciado un aumento en sus medidas de seguridad.