Turismo mortal

“Estaba en el autobús cuando escuché un gran ‘boom’. Salimos por un hueco que dejó la explosión”, dijo a Channel 2 news de Israel uno de los sobrevivientes del ataque suicida de este miércoles en Bulgaria. Cincuenta turistas israelíes recién llegaban a Burgas cuando explotó una bomba en el autobús que los llevaría a sus hoteles. Treinta y cuatro personas resultaron heridas y murieron cinco israelíes, el conductor búlgaro y el kamikaze. El gobierno de Israel no tardó en nombrar responsables: “Este es un ataque terrorista de Irán que se está esparciendo por el mundo”, dijo el primer ministro, Benjamín Netanyahu. La explosión en Burgas parece estar relacionada con la captura, la semana pasada, de un libanés presuntamente ligado a Hezbollah que estaba planeando atacar a turistas israelíes en Chipre. En febrero ocurrieron también atentados en Nueva Delhi y Georgia contra diplomáticos de Israel, ambos atribuidos a Irán. La tensión entre los dos países sigue creciendo y, aunque hasta ahora Israel había mantenido la calma, esta vez su primer ministro dijo a los medios que “Israel responderá con la fuerza”.