Venezuela: Se busca líder opositor

El presidente de Venezuela cumplió 13 años en el poder el 2 de febrero y aunque hay consenso en cuanto a que la oposición tendrá frente a sí en octubre la elección "más ganable", Chávez sigue siendo el favorito y el político más popular del país.
 
Mientras la oposición se apresta a elegir su candidato único este domingo en unas inéditas primarias, gane quien gane el lunes empezará otra historia, la verdadera.

Comenzará el proceso de enfrentarse a Hugo Chávez Frías, quien buscará su tercera reelección consecutiva, en una campaña que se anticipa feroz, con un presidente combativo que se asegura curado del cáncer que lo tuvo a maltraer el año pasado.

El gobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, aparece como el claro favorito –así lo indican las encuestas– a imponerse en las primarias por sobre el gobernador de Zulia, Pablo Pérez. Otros tres precandidatos compiten con escasas posibilidades.

Pero cuando empiece la semana que viene el proceso de cara a octubre, ¿qué lecciones puede haber aprendido la oposición de 13 años de derrotas frente a Chávez?
 
A la sombra de Chávez
 
La oposición hizo en 2006 uno de sus primeros intentos por unirse detrás de un candidato único, aunque aquella vez, a diferencia de ahora, el elegido no salió de elecciones internas sino que fue seleccionado por los principales líderes del bloque.

La candidatura del entonces gobernador de Zulia, Manuel Rosales, se definió apenas tres meses antes de los comicios, luego de divisiones y conflictos en la interna opositora en la que los partidos ni siquiera podían acordar la manera de elegir al candidato.

Pero el hecho de superar la normal discordancia y las fracturas dentro de la oposición, aunque un primero paso, no alcanzó para convencer al electorado.

De hecho, durante la campaña llegaron a haber 19 candidatos en el bando opositor.

BBC Mundo intentó en repetidas ocasiones comunicarse con Rosales, quien está exiliado en Lima tras ser acusado de corrupción, para conocer sobre su opinión sobre qué errores había cometido la oposición en el pasado y qué necesitaba de cara a octubre, pero no accedió a una entrevista.

Dos años años después del fracaso electoral de 2006, la oposición comenzó a trabajar de forma más rigurosa en pos de la unión. Allí surgió la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), un heterogéneo bloque que agrupa ahora a una veintena de partidos.

Desde 1999 la oposición ha tenido algunas alegrías en las urnas: el rechazo a la reforma constitucional en 2007, el avance en las regionales de 2008 y el buen desempeño en las parlamentarias de 2010, donde obtuvo apenas 100.000 votos menos que el oficialismo.
 
Pero en 13 años ningún opositor se ha mostrado capaz de hacerle sombra al liderazgo de Hugo Chávez.

 
Los errores

¿Qué ha fallado hasta ahora?

"La oposición ha aprendido, reconoció su problema hace un par de años. Estuvo perdida y cometió muchos errores", le dice a BBC Mundo Luis Vicente León, director de la firma de opinión pública Datanálisis.

La participación en el golpe de Estado que sacó del poder a Chávez durante 48 horas en 2002, el boicot a las elecciones parlamentarias de 2005 y el hecho de dejarse dominar por los radicales -con la consecuencia de alejarse del crucial sector de los independientes- han minado las posibilidades del bloque.

"No entendían la magnitud de la fortaleza de Chávez y que había que unirse y tener una oferta más concentrada en los pobres. El target tiene que ser ese. Cuanto más lejos se esté de las elites más fácil es ganar la elección", señala León.

"Tenemos que dejar los egoísmos a un lado. Nadie puede estar con carpetas particulares, una direccionalidad política es lo que nos ha hecho falta. En la oposición nos ha faltado alguien que lidere y plantear una alternativa", le dice a BBC Mundo, el precandidato Pablo Pérez, segundo en los sondeos de cara al domingo.
 
Para la socióloga y directora del Observatorio Global de Medios de Venezuela, Maryclen Stelling, el error de la oposición, que le generó reducir sus chances electorales en diversas contiendas, fue básicamente mostrarse incapaz de "decodificar las necesidades del venezolano".

"Hace años que dejó de descifrar lo que quería Venezuela, perdieron sintonía, es una pérdida gravísima y esa sintonía la tiene Chávez. Pero la oposición ha hecho un aprendizaje y pretende descifrar esa conexión telúrica, psicológica, política y afectiva del pueblo con Chávez. No sería la misma sintonía que tiene Chávez pero sí pueden comprender mejor lo que Venezuela quiere", asegura.

 
Las claves
 
Ampliar el espectro y bajar los decibeles parecen ser las claves. No es casualidad que los dos favoritos a ganar la primaria este domingo sean Capriles y Pérez, dos que hablan de mantener las "misiones" (programas sociales implementados por el gobierno de Chávez) a la vez que evitan la confrontación directa y agresiva con el mandatario.

"Al electorado venezolano en general no le agrada el discurso de ningún politico que pretenda descalificar al votante: el irrespeto hacia quienes apoyan al presidente genera rechazo. Les gusta escuchar propuestas, tener candidatos enfrentados pero con argumentos", dice el profesor de Teoría Política de la Universidad Central de Venezuela, Nicmer Evans.
En la oposición venezolana -agrega- algunos candidatos han comprendido que el discurso de Diego Arria o de María Corina Machado no sirve, tienen que pensar en el electorado chavista, lo necesitan para octubre, sólo con el electorado opositor en octubre no tienen chances".

Recuerdan los críticos del gobierno que no se trata sólo de un tema de sintonía, carisma o liderazgo y mencionan las dificultades de ser oposición.

Hacen hincapié en los "abusos" que, aseguran, comete Chávez desde su posición: desde las horas de cadenas obligatorias de radio y televisión hasta tener a disposición infinitos recursos del Estado usados, denuncian, con poca transparencia y a su antojo.

Pero más allá de las adversidades, gran parte de la oposición venezolana parece haber comprendido que no alcanza con que su candidato sea "anti-Chávez", sino que necesitan una oferta que seduzca al chavista desencantado.

El domingo por la noche tendrán a un candidato: el encargado de pelear con Chávez el 7 de octubre. No son pocos quienes confían que en 2012 la historia sea otra.