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Sigue la incertidumbre en venezuela por la suerte del mandatario Hugo Chávez a menos de una semana de su posesión. | Foto: EFE/MIGUEL GUTIÉRREZ

¿Y si Chávez no se posesiona el 10 de enero?

Si el mandatario venezolano muere o se declara su falta absoluta por razones de salud, el gobierno debe convocar a elecciones nuevamente.

1 de enero de 2013

El 10 de enero de 2013 será un día clave para los venezolanos. El país entero está pendiente de la fecha porque es cuando el presidente Hugo Chávez inicia su tercer período presidencial. Pero es poco probable que el mandatario pueda juramentar ante la Asamblea Nacional y asumir el cargo.

Chávez se encuentra hospitalizado en Cuba y su estado de salud es “delicado”, según han informado voceros del gobierno venezolano, luego de que se sometió a una operación el pasado 11 de diciembre para tratar el cáncer que padece, y del cual supuestamente se había curado, como lo dijo él mismo durante la campaña presidencial. Rumores de que el presidente está en sus últimas horas circulan tanto en medios de comunicaciones nacionales e internacionales, como en redes sociales, pero nada ha sido confirmado de manera oficial.

Mientras tanto, se barajan las alternativas sobre lo que debe pasar a partir del 10 de enero, ante una ausencia provisional o total del mandatario. El artículo 233 de la Constitución de Venezuela, lo expresa claramente. “Si se produce la falta absoluta del Presidente electo antes de tomar posesión, se procederá a una elección universal directa y secreta dentro de los treinta días consecutivos siguientes. Mientras se elige y toma posesión el nuevo Presidente o la nueva Presidenta, se encargará de la Presidencia de la República el Presidente o Presidenta de la Asamblea Nacional.”

La misma constitución considera la “falta absoluta” por muerte, renuncia o incapacidad física o mental, certificada por una junta médica, designada por el Tribunal Supremo de Justicia y aprobada por la Asamblea Nacional.
Si el presidente muere antes del 10, la falta absoluta no tiene discusión, si continúa enfermo, la interpretación y el procedimiento para decretar su ausencia total podría enredarse y dilatarse, lo que dejaría al país en un vacío de poder inédito. El destino de Venezuela quedaría en manos del Tribunal Supremo de Justicia y la Asamblea Nacional, y a ellos les corresponde definir en la mayor brevedad posible la situación.

Sectores de la oposición han cuestionado lo “justo” que sería la actuación de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia. La semana pasada, siete magistrados fueron reemplazados porque se les vencía el periodo. Entre los que salieron está Blanca Mármol, quien dijo públicamente que había sido una maniobra jurídica motivada por intereses políticos, pues no es coincidencia que su sustitución ocurra justo ahora cuando los magistrados deben designar la junta médica que certifique si Chávez está en condiciones de gobernar o no.

Anteriormente, el reemplazo de los magistrados salientes era escogido por la Asamblea Nacional y no asumían los suplentes directamente. Pero en un fallo inédito, la Sala Constitucional decretó que el reemplazo se hacía de inmediato.

La Asamblea Nacional, donde dominan los partidos de filiación chavista, también debe cumplir un rol clave ante lo que suceda el 10. Pero antes, el próximo 5 de enero, debe elegir a sus propias directivas. La Asamblea es presidida hoy por el ex militar Diosdado Cabello.

Dentro del chavismo, Cabello es visto como el principal competidor por el poder del vicepresidente Nicolás Maduro, a quien Chávez designó como candidato si él falta. Entre las distintas facciones chavistas se estaría librando un pulso entre quienes apoyan a Cabello y quienes apoyan a Maduro. Si Cabello es reelegido como el presidente de la Asamblea, probablemente sería el próximo mandatario de Venezuela en ausencia de Chávez, hasta que convoque a nuevas elecciones.

EE.UU. espera comicios transparentes

El Departamento de Estado de Estados Unidos pidió este 2 de enero que, si el presidente venezolano, Hugo Chávez, no pudiera ejercer su cargo, se dé en Venezuela una transición "consistente con la Constitución", con "elecciones transparentes, libres e imparciales".

En la primera rueda de prensa del año, la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, dijo que, "si se da la circunstancia en la que él (Chávez) no puede ejercer como presidente queremos ver que un proceso de transición se lleve a cabo de manera consistente con la Constitución de Venezuela".

Chávez permanece hospitalizado en Cuba tras ser operado el pasado 11 de diciembre por la reaparición del cáncer y ha nombrado como su "sucesor" al vicepresidente, Nicolás Maduro.

Nuland confió en que, ante la eventualidad de que no pueda asumir su cuarto mandato el próximo 10 de enero, se lleve a cabo en el país "una elección que sea totalmente transparente, libre e imparcial, incluida la atmósfera para esos comicios".

"Juzgaremos nuestra capacidad para mejorar las relaciones con Venezuela sobre la base de los pasos que tomen", indicó la portavoz, quien recordó que EE.UU. ya ha intentado una mejora en las relaciones con el país suramericano, pero "se ha demostrado que es complicado".

Nuland dijo hoy que las informaciones de las que dispone EE.UU. sobre la salud de Chávez están basadas en los detalles que hace público el Gobierno venezolano, que a través de Maduro ha indicado que el mandatario se enfrenta a un postoperatorio "complejo" y "delicado".

Ayer mismo, desde La Habana, Maduro aseguró que el presidente mantiene "una fuerza gigantesca", al tiempo que reveló que Chávez le ha pedido que mantenga al pueblo informado "siempre con la verdad, por dura que ella fuera".

La oposición venezolana ha pedido que no se oculte la verdad a la nación sobre el estado de salud de Chávez.

Chávez, de 58 años y quien fue intervenido por cuarta ocasión a raíz del cáncer, deberá asumir el próximo 10 de enero un nuevo mandato de seis años tras resultar ganador de los comicios del pasado 7 de octubre, en los que derrotó al líder opositor Henrique Capriles.