Alarma en Pakistán

12 de febrero de 2006

Más de un mes después del terremoto que sacudió a Pakistán y que cobró la vida de unas 80.000 personas, lo peor parece que aún no ha pasado para las cerca de tres millones de personas que perdieron sus hogares y que se encuentran en refugios temporales. La proximidad de las nevadas y las escasas condiciones sanitarias hacen temer porque el coletazo del terremoto cobre más vidas en los próximos meses. La semana pasada, la Organización Mundial de la Salud dijo que teme el posible brote de una epidemia de cólera en la zona e informó que las malas condiciones de muchos de los refugios han provocado algunas enfermedades, como diarreas crónicas, que tienen en jaque a la población. Se estima que unos 350.000 damnificados en zonas remotas están en serio peligro por la falta de vivienda y ayudas médicas.