"Borracho hasta el amanecer..."

La ley que a partir del próximo noviembre les permitiría a los pubs o tabernas británicas mantener sus puertas abiertas más allá de las 11 de la noche ha causado gran revuelo en ese país. Desde la Primera Guerra Mundial existe una reglamentación que obliga a esos emblemáticos establecimientos a cerrar a esa hora. El proyecto ha generado una fuerte oposición de quienes piensan que sería darles vía libre al alcoholismo y al vandalismo. Como escribió el diario ultraconservador Daily Mail: "Se multiplicarían los actuales problemas y se convertirían las calles en campos de batalla y las aceras, en mares de vómito". Los que apoyan la ley, entre ellos el primer ministro Tony Blair, creen que la ampliación de los horarios ayudaría a que hubiera menos borrachos violentos en las calles, ya que estos no se verían obligados a tomar de manera compulsiva (binge drinking) por la presión de la hora de cerrar.