Bush y la marihuana

Doug Wead, ex asesor y (por lo visto) ex amigo del presidente norteamericano, George W. Bush, ya tiene publicista y mánager. De 1998 a 2000 grabó secretamente sus conversaciones con Bush, y fragmentos de los casetes fueron revelados al público en la campaña para impulsar su libro La crianza de un presidente. Lo que causa controversia es que el presidente Bush parece admitir haber fumado marihuana durante su juventud, pero se niega a hablar de ello para no dar un pésimo ejemplo a la juventud. Lo que reaparece en los casetes, y él ha admitido públicamente, son sus problemas con la bebida y su gran religiosidad. Wead declaró a The New York Times que había decidido hacer las grabaciones por su pertinencia histórica. Bush, sin embargo, no queda muy mal porque sus palabras revelan cierta consecuencia con sus actos posteriores.