Frosty va de viaje

29 de septiembre de 2003

El Grupo de liberación de los gnomos de jardín vuelve a atacar. Aunque esta vez el afectado no es un gnomo de jardín, sino un muñeco de nieve. La pasada Navidad Frosty, un hombre de nieve inflable, desapareció misteriosamente del jardín de Helen Bevan, su dueña, en un pueblo de Gales. Pronto la señora Bevan empezó a recibir postales de lugares exóticos como Tailandia, Malasia y China, todas firmadas por Frosty. Pero ahí no acaba la historia. Cuando aún no salía de su asombro, una noche encontró al muñeco en la puerta de su casa, con un video pegado al cuerpo. "Alguien lo filmó bebiendo en bares, haciendo compras en el supermercado y hasta tratando de entrar en una estación de policía", afirma la señora. Frosty, sin embargo, volvió a irse, y de tanto en tanto la señora Bevan sigue recibiendo postales desde los lugares más insólitos del mundo.