LA NUEVA MARSELLA

13 de abril de 1992

COMO SE PUEDE llamar "A las Armas!" en una ceremonia olímpica? ¿O convocar a los ciudadanos a bañar los campos con la sangre corrupta de los enemigos? Una niña de lO años desató sin querer un debate que atraviesa a Francia. En la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno, la inocente voz infantil subrayó por contraste la belicosidad de la letra. EI hecho dio nuevos bríos a la controversia entre quienes pretenden "suavizar" a la Marsellesa y quienes consideran que la letra es parte de la herencia de los franceses, así suene sanguinaria a estas alturas. El Comité por una Marsellesa de Fraternidad, que cuenta entre sus miembros a la primera dama Danielle Mitterrand, considera que debería someterse a concurso una nueva letra que constituya "un texto en armonía con el espíritu republicano de liber tad, igualdad y fraternidad y con el deseo universal por la paz". Dicen los defensores de esa idea que después de estudiar 175 himnos, han llegado a la conclusión de que Francia es el único país del mundo que sigue teniendo un himno belicoso.