MÉXICO

Surgen los paras

25 de enero de 2009

La ineficacia de la justicia mexicana para combatir el narcotráfico tiene una nueva y alarmante consecuencia para la gobernabilidad del país del norte. Se trata del surgimiento de "comandos vengadores", fuerzas paraestatales que buscan restablecer la tranquilidad en algunas de las zonas del país más golpeadas por la guerra entre los carteles y el Estado. Es el caso de Ciudad Juárez, estado de Chihuahua, una de las localidades más violentas del país, donde el 'Comando Ciudadano por Juárez' divulgó en días recientes que su misión es "terminar con la vida de un delincuente cada 24 horas". Este 'Comando' se suma a una docena de grupos de autodefensas aparecidos en los últimos meses en los estados de México Guerrero, Morelos y Sonora. Lo más grave de todo es que la comunidad ha comenzado a ver a estos 'vigilantes' como un mal necesario, lo cual es el caldo de cultivo para la proliferación de agrupaciones de este tipo. Aunque voceros de la Procuraduría General de la República han afirmado que el fenómeno tal vez sea una estrategia de los propios carteles, la experiencia con las fuerzas paraestatales en América Latina demuestra que es una reacción natural al vacío de poder. Los Pepes (Perseguidos por Pablo Escobar) y las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), en Colombia, y los escuadrones de la muerte, en Brasil y Guatemala, son la prueba fehaciente de que, en la mayoría de los casos, la cura puede resultar peor que la enfermedad.