Un papel complicado

4 de julio de 1994

POR MUCHOS AÑOS los industriales de las artes gráficas en Colombia estuvieron sometidos a cuotas restrictivas o cupos, y a pagar por el papel que necesitaban precios impuestos por las pocas empresas productoras instaladas en el país. Con la apertura, y gracias a la crisis mundial de la cotización de la materia prima, lograron un gran alivio en los precios (casi del 30 por ciento menos) por muchos meses. Incluso los papeleros nacionales perdieron millonarias sumas en los dos últimos años y se vieron sometidos a una competencia feroz por parte de los importadores. Sin embargo, a comienzos de 1994 la situación mundial de precios cambió y hoy casi da lo mismo comprar en el interior que en el exterior.
A pesar de esa situación, en los actuales momentos el suministro de papel en el país no es el suficiente por lo dispendioso del transporte y en algunos casos, así sea en el extranjero, es difícil conseguir una adecuada calidad. Voceros de la industria gráfica advierten que las cosas casi que volvieron a estar como antes y sin esperanza de que mejoren en el corto plazo. Como quien dice, unas de cal y otras de arena.