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| Foto: Archivo SEMANA

BALANCE

Al menos 29.000 damnificados dejan inundaciones en cinco regiones

Las zonas con la situación más crítica están en las cuencas de los ríos Magdalena y Cauca.

23 de abril de 2011

Entre los últimos hechos a causa de la ola invernal que continúa afectando gran parte del país, la Gobernación de Cundinamarca ordenó la evacuación del casco urbano del municipio de Pasca ante la amenaza de creciente de las aguas del río Corrales que se surte del páramo de Sumapaz.

Así mismo, la Dirección de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional reportó una creciente del río Magdalena, que supera 70 centímetros su cota de inundación, que inundó en tres puntos la carretera del Magdalena Medio, por lo que se pidió a quienes retornen este fin de semana, desde la región Caribe al interior del país, tomar la ruta por Bucaramanga.

Son al menos 29.100 las personas que quedaron damnificadas por nuevas inundaciones y desbordamientos de ríos en el país, en lo que denominaron organismos de socorro como una "situación delicada" por efecto de las lluvias, dijeron el sábado fuentes humanitarias.
 
Con estos afectados se elevó a casi 160.000 el número de damnificados por el actual período lluvioso, según los registros de la Cruz Roja Colombiana (CRC), que indican que las precipitaciones dejan en lo que va de año 93 muertos, 52 heridos y 12 desaparecidos.

"La situación continúa delicada por cuanto sigue lloviendo en buena parte de los 24 departamentos (de un total de 32) que tenemos afectados", dijo el director del Socorro Nacional de la CRC, César Urueña.

Las situaciones más delicadas se presentan en zonas bañadas por los ríos Magdalena y Cauca, que son las dos principales arterias fluviales del país, señaló Urueña en declaraciones telefónicas.

El director del Socorro Nacional precisó que el mayor número de damnificados de las horas recientes se dio en La Dorada, población ribereña del Magdalena en el departamento de Caldas, con 4.200 familias desarraigadas por las inundaciones.

Otras 1.700 familias resultaron afectadas en Puerto Boyacá, localidad del departamento de Boyacá y también ribereña del Magdalena, continuó Urueña, y agregó que 1.200 más debieron desalojar sus domicilios en Puerto Berrío, Puerto Nare y Puerto Triunfo, en el departamento de Antioquia.

Estas tres poblaciones son algunas de las que más afectadas por las inundaciones, debido a la apertura de las compuertas del embalse de la central hidroeléctrica de Betania, situado cerca de la ciudad de Neiva (suroeste) y que el viernes alcanzó su nivel máximo de almacenamiento.

Urueña añadió que 700 personas fueron también evacuadas en Ubaté, población lechera del departamento de Cundinamarca, afectada en parte por el desbordamiento de la represa El Hato y que afectó las veredas San Luis y Palo Gordo.

Asimismo, unas 50 familias sufrieron los rigores de la salida de cauce del río Agua Blanca en Pamplona, municipio de Norte de Santander, departamento de la frontera noreste con Venezuela.

Además de las inundaciones y las avalanchas, las lluvias han creado una emergencia en el transporte por tierra, con 26 carreteras nacionales y regionales cortadas, y casi 300 con paso restringido, lo que, advirtió Urueña, complicará el regreso de los viajeros tras la temporada de descanso de Semana Santa.

"La situación es compleja", sostuvo Urueña, quien indicó que la CRC completa la atención de las emergencias con el envío de ayuda humanitaria para los damnificados por la temporada lluviosa.

"Llevamos más de un año con lluvias diarias", advirtió, al recordar que el país afronta desde 2010 intensas precipitaciones por efecto del fenómeno de La Niña, que, según el servicio meteorológico estatal, se disipará a mediados de año con el fin de este período de lluvias, que es el primero de los dos anuales en Colombia.

Las dos temporadas lluviosas de 2010 y la primera de 2011 dejan al menos 415 muertos, 489 heridos y casi tres millones de damnificados, subrayó el director del Socorro Nacional de la CRC.

EFE