Andrés Felipe Arias seguirá tras las rejas

Este martes la sala penal del Tribunal Superior de Bogotá, a través del magistrado Germán Lara, decidió desestimar la petición de la defensa del exministro de Agricultura Andrés Felipe Arias, en la cual se planteó la necesidad de que el exfuncionario, procesado por el escándalo de Agro Ingreso Seguro (AIS), recuperara su libertad.

Según Lara, Arias puede todavía puede influir sobre los testigos del proceso. El defensor del exministro, Jorge Aníbal Gómez, negó que eso fuera así y planteeó ante la Corporación la necesidad de que su representado afronte lo que falta del juicio fuera de un centro de reclusión.

El magistrado Lara les dio credibilidad a las declaraciones entregadas por Javier Romero, el entonces director de Desarrollo Rural, y Camila Reyes del Toro, quien era la directora de Comercio y Financiamiento. Ambos exfuncionarios entregaron a las autoridades los reportes de lo que se habló en reuniones.

"Para este juez de control de garantías, bastan las anteriores referencias probatorias para señalar que si bien no se puede desconocer, según el dicho de algunos, se pretendió hacer una defensa institucional del referido programa, atrás subyacía en altos funcionarios, incluido el exministro, un claro interés en manipular testigos claves para que las autoridades desentrañaran lo realmente sucedido en la puesta en marcha del citado programa", precisó.

De acuerdo con el magistrado, es muy diciente el hecho de que Arias prestó su oficina para muchas de las reuniones, en las que se trataron temas del programa agrario, que en el momento ya era un escándalo en el país.

"El mayor interrogante y del cual no se dio explicación alguna es cuál es la razón para que el exministro facilitara su oficina para tantas reuniones si nada tenía que ver con las probables fallas o vacíos en el programa Agro Ingreso Seguro”, indicó Lara. También dijo que lo anterior demuestra que las reuniones no se fueron “inocentes encuentros para defender un programa del Estado”.

En esa medida, el magistrado indicó que está demostrado que Arias participó o coadyuvó en diversas reuniones antes de ser capturado, encuentros con los que se buscó inducir testigos a su favor.

Así las cosas, Arias, procesado por los delitos de peculado por apropiación a favor de terceros e interés indebido en la celebración de contratos, deberá seguir recluido en Escuela de Caballería, donde se encuentra desde julio del 2011.

En la mañana de este martes, tanto la defensa de Arias como la Procuraduría, entidad que avaló la libertad para el exministro, solicitaron en una reposición que se cambie la determinación tomada por el alto tribunal, asunto que deberá ser resuelta de inmediato.