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Angelino Garzón concluyó un primer día en Washington marcado por el TLC

El vicepresidente Angelino Garzón concluyó un primer día de encuentros con funcionarios estadounidenses en Washington, a los que transmitió la necesidad de que se apruebe el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre las dos naciones.

25 de enero de 2011

Garzón, que llegó a la capital estadounidense este sábado y se marchará el próximo domingo, hizo del TLC su prioridad en la mayor parte de los encuentros del día, según confirmaron fuentes de la Embajada de Colombia.

En ese sentido, su cita más importante fue la que compartió con el Representante de Comercio Exterior de Estados Unidos, Ron Kirk, con quien habló del TLC y de su voluntad de que Washington amplíe por dos años más la Ley de Preferencias Arancelarias andinas (Atpdea, por su sigla en inglés).

A finales de diciembre, el legislativo estadounidense aprobó prorrogar esa ley, adoptada en 1991 para premiar la lucha antidrogas de los países andinos, sólo por seis semanas, hasta el 15 de febrero próximo.

Garzón se reunió también con el legislador demócrata Sander Levin, quien visitó Bogotá hace unos días, y con el presidente del sindicato internacional de alimentos y trabajadores comerciales UFCW, Joseph T. Hansen.

Angelino Garzón concluyó su jornada con una conversación informal con varias organizaciones no gubernamentales, entre ellas la Oficina de Washington para América Latina (WOLA, por su sigla en inglés), una reunión con la Unión de Negocios de Colombia y un encuentro con el senador demócrata Max Baucus.

El vicepresidente se reunirá mañana con otros congresistas, como los republicanos David Camp y Kevin Brady, y con el Caucus del Congreso para Colombia, integrado entre otros por el republicano Mario Díaz-Balart, además de con la secretaria de Trabajo, Hilda Solis.

El punto fuerte en su estrategia para impulsar el TLC llegará el viernes, cuando se reunirá con la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y con el vicepresidente, Joseph Biden.

El TLC, firmado en 2006, está paralizado en el Congreso de EE.UU. por la preocupación de los demócratas sobre la situación de los derechos humanos y la protección a los sindicalistas en Colombia.
 
EFE