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REPORTAJE GRÁFICO

Artes Marciales Mixtas: sangre en la jaula

Considerada desde sus inicios como salvaje y clandestina la práctica de las Artes Marciales Mixtas es hoy una respetada y durísima disciplina deportiva que atrae cada vez más seguidores. Fotografías de: Juan Carlos Sierra.

17 de noviembre de 2012

No morder, no arañar, no dar cabezazos, no meter los dedos en los ojos, la nariz o la boca, no dar golpes bajos, son algunas de las reglas de los combates de las Artes Marciales Mixtas (AMM). A pesar de la violencia de cada contienda, los deportistas advierten que el octágono (escenario donde se lleva a cabo el combate) es un espacio de respeto, compañerismo y sana competencia. Incluso, aseguran que teniendo en cuenta el número de muertes asociadas a su ejercicio, las AMM son mucho menos peligrosas que deportes extremos como el paracaidismo o de contacto como el boxeo. Pero son uno de los deportes más rudos y la sangre aparece inevitablemente, en medio de los rugidos del público, como protagonista de los combates. Al final, el ganador no es quien logre propinar a su oponente un knock out o logre rendirlo por medio de una llave de sumisión; el verdadero triunfo consiste en bajar caminando de la jaula por sus propios medios. En cada velada las marcas en el cuerpo de los deportistas dejan en evidencia la intensidad de las contiendas y las cicatrices son trofeos que se exhiben con orgullo.

En Colombia la práctica de esta disciplina va en aumento y es cada vez más común encontrar torneos informales de AMM donde, en improvisados escenarios, el deporte se transforma en espectáculo para un público que encuentra en la agresividad de los combates una alternativa de entretenimiento.
 

Foto: Juan Carlos Sierra/SEMANA.


 Foto: Juan Carlos Sierra/SEMANA.

• Los combates donde se disputan títulos o campeonatos tienen una duración de cinco asaltos de cinco minutos con un minuto de descanso entre ellos. Las exhibiciones y los combates regulares no pueden exceder los tres ‘rounds’. Un alto porcentaje de los combates de alto nivel terminan en los dos primeros asaltos.
 

Foto: Juan Carlos Sierra/SEMANA.

• Las reglas de las AMM están diseñadas para que el público observe el máximo de acción posible. El árbitro puede parar la pelea y levantar a los deportistas si considera que ninguno se esfuerza para someter a su oponente en el combate de piso. El evitar el contacto con el oponente se considera como una falta.
 

Foto: Juan Carlos Sierra/SEMANA.

• Las AMM son distintas al ‘full contact’ o ‘kickboxing’ deportes que las antecedieron. El jiu-jitsu brasileño, el ‘muay thai’, la lucha olímpica, el ‘sambo’, el ‘san shou’, el ‘judo’, el ‘karate’ son algunas de las más populares disciplinas marciales permitidas para los practicantes de este deporte.
 

Foto: Juan Carlos Sierra/SEMANA.

• En los torneos organizados en Colombia es frecuente encontrar deportistas de países como Brasil, Estados Unidos, Puerto Rico o México, quienes se convierten en la atracción principal de los espectáculos debido su capacidad técnica y agresividad.
 

Foto: Juan Carlos Sierra/SEMANA.