Eliminatoria al 2018: así escogerá el uribismo a su carta presidencial

Hace un par de semanas, cuando el Centro Democrático renunció a una consulta popular para escoger candidato presidencial, Álvaro Uribe, jefe natural del partido, les había pedido a sus precandidatos ponerse de acuerdo en un mecanismo de selección.

La urgencia era manifiesta. El expresidente y senador no solo tiene entre ceja y ceja las elecciones a la presidencia de la república, en las que quiere recuperar el poder. También apuesta a las elecciones de marzo, y quiere que el Centro Democrático sea el que más número de escaños saque en el Senado. Para ello cuenta con que los nombres de los precandidatos. Como solo habrá un ganador, quiere incluir en sus listas a los otros cuatro que participaron en esta disputa. Una especie de premio de consolación.

Pero como el próximo 11 de noviembre se abren las inscripciones de candidatos a Senado y Cámara, periodo que se extenderá por un mes, hasta el 11 de diciembre. Uribe no quiere darle más largas al asunto de la candidatura presidencial, y que por la falta de acuerdo entre sus aspirantes se altere su cronograma diseñado para las elecciones parlamentarias.

Después de aquel ultimátum, los cinco precandidatos llegaron a un acuerdo para definir el nombre que representará al uribismo en las presidenciales del 2018. Uribe, después de varios intentos por alcanzar un consenso, encomendó a una de sus precandidatas, la senadora María del Rosario Guerra, para que liderara este proceso. El martes, en una de las oficinas del Capitolio, los cinco precandidatos se reunieron, en presencia de Uribe, y acordaron un novedoso mecanismo.

Los precandidatos se someterán a dos encuestas, una abierta y otra solo a los militantes del Centro Democrático, que serán contratadas a dos firmas encuestadoras reconocidas. Estas tendrán cinco entregas cuyos resultados se irán conociendo semanalmente, y muy probablemente a partir de la semana del 13 de noviembre.

El método había sido sugerido por el empresario Carlos Enrique Moreno, cuñado del expresidente Álvaro Uribe, y se conoce como “rolling simple” o muestreo continuo, en el que se fijan una serie de cortes, en los que saldría eliminado el último en estos sondeos. Lo que definieron los precandidatos es que a partir de la tercera encuesta se haría la primera eliminatoria.

Cada firma encuestadora hará la misma pregunta a personas diferentes. El contenido de la pregunta está siendo definido, aunque podría ser similar al que presentó el centro Democrático ante el Consejo Electoral: “¿Quién de estas personas cree usted puede ser el representante del Centro Democrático para participar con otros partidos, movimientos políticos, o grupos significativos de ciudadanos, en una consulta u otro mecanismo, para escoger el candidato único de coalición, a la presidencia de la república para el periodo constitucional 2018 – 2022?”.

 ¿Cinco o siete precandidatos?

Además de la pregunta, el centro Democrático aún deberá definir un asunto mayor. Si son cinco los nombres que se van a someter en la consulta o serán siete.

De momento, los senadores Iván Duque, María del Rosario Guerra y Paloma Valencia; el excandidato a la vicepresidencia Carlos Holmes Trujillo, y el exviceministro Rafael Nieto. Son los cinco precandidatos que durante cuatro meses han recorrido el país exponiendo sus cartas.

Sin embargo, las encuestas podrían incluir otros dos nombres, el del excandidato presidencial Óscar Iván Zuluaga, quien pareció haber revivido su carrera política desde que el Consejo Nacional Electoral archivó la investigación contra su campaña por presunto ingreso de dineros de Odebrecht.

El otro nombre que podría incluirse es el del exsenador Luis Alfredo Ramos quien hace un mes se inscribió como militante del centro Democrático y asegura que no tiene ningún impedimento para ser candidato presidencial.

Pero ha sido el propio Álvaro Uribe el que ha frenado estas candidaturas. En el caso de Zuluaga, preocupado por las declaraciones del fiscal Néstor Humberto Martínez quien insiste en tener pruebas de que dineros de Odebrecht sí ingresaron a las campañas de Zuluaga y Juan Manuel Santos en el 2014. Y en el caso de Ramos se le ha dado un plazo prudencial para que la Corte Suprema de Justicia lo exonere definitivamente del proceso que le adelantó por parapolítica.

SEMANA supo que la definición de incluir más nombres para ser consultados en la encuesta pasará por el propio Uribe. De hecho, entre el martes y miércoles se ha hablado de una reunión entre el expresidente con Óscar Iván Zuluaga, de la que por el momento no se ha tenido noticia.

Aunque solo faltan estas decisiones, el centro Democrático ya tiene mecanismo de selección del candidato presidencial, y en las próximas semanas se adelantará una eliminatoria hacia las elecciones del 2018. En teoría ya no será el que diga Uribe.