Otro aterrador caso de ataque con ácido

Hace pocos días el presidente, junto a Natalia Ponce de León y otras víctimas de ataques con ácido, celebró la promulgación de la ley que endurecía las penas para quienes cometen este delito.

Fue la oportunidad para decirles a los criminales que no podían andar por el país llevando a cabo este tipo de repudiables hechos sin ir a la cárcel y pagar penas representativas.

Pero mientras en Bogotá se daba el transcendental paso, en otra parte del país, más exactamente en Neiva (Huila), alguien desoyó este anuncio y protagonizó un nuevo y lamentable hecho.

Se produjo el pasado sábado a las 9:30 p. m. cuando una menor de 15 años, que se dirigía a un centro de salud a visitar a su madre, fue atacada, presuntamente, por dos hombres que le arrojaron la sustancia corrosiva en el rostro y otras partes del cuerpo.

"Fue abordada por dos sujetos que se movilizaban en una motocicleta, el sujeto desciende del velocípedo (sillín) y sin mediar palabra arroja una sustancia líquida por establecer (...) posteriormente emprenden la huida", se lee en el informe de la Policía, conocido por Semana.com.

Inmediatamente, la joven fue enviada al Hospital Universitario de Neiva, donde es atendida por especialistas. Sin embargo, la menor, que sufrió quemaduras en el rostro y el tórax, deberá ser trasladada a la Unidad de Quemados del Hospital Simón Bolívar, en Bogotá, especializado en este tipo de eventos.

Pero en el lamentable hecho ella no fue la única afectada, pues su hermana, quien la acompañaba en ese momento, presentó quemaduras en una de sus manos.

En el reporte, al que este portal tuvo acceso, esta última dio detalles de cómo eran los atacantes. Según ella, la persona que arrojó la sustancia era un hombre de tez morena, de contextura gruesa y vestía pantalón oscuro.

Al menos 628 colombianos han sido víctimas de ataques con ácido en los últimos seis años. Con la sanción de la Ley Natalia Ponce, la pena para quienes cometan agresiones de ese tipo aumentó de 150 a 240 meses de prisión si la conducta es simple; de 251 a 360 meses de prisión si el ataque causa deformidad o daño permanente en la víctima, y se aumenta la pena hasta en una tercera parte si la conducta conlleva deformación del rostro.

Además, prevé que el homicidio agravado (cuando la conducta sea cometida con sevicia) y las lesiones causadas con ácido no gozarán de los beneficios de suspensión condicional de la ejecución de la pena, de prisión domiciliaria y de ningún otro de carácter judicial o administrativo.

Luego de la promulgación del proyecto se espera que los atacantes de esta menor reciban un castigo ejemplar.