“Las puertas de la U están abiertas para los que se quieran ir”

SEMANA: Sin candidato presidencial propio y con varios congresistas investigados, la percepción es que La U está en crisis. ¿Cuál es su balance de la reciente convención del partido?

AURELIO IRAGORRI: La bancada parlamentaria completa y la presencia de 2.000 líderes regionales en la convención es símbolo de fuerza y unidad. El encuentro sirvió para que la gente mantenga y consolide la esperanza y confianza en el partido.

SEMANA: Existe la sensación de que La U es el partido del presidente, pero el presidente no es el presidente del partido.

A.I.: El presidente de la república es el presidente de todos los colombianos. No llegué a la dirección del partido para ser el ventrílocuo del gobierno nacional. Voy a inspirar al partido de la unidad en el proceso de la reconciliación.

SEMANA: ¿En la campaña electoral van a defender la gestión del gobierno?

A.I.: La U defenderá las iniciativas de este gobierno que han beneficiado a los colombianos, como la paz y la reducción de la pobreza, y se distanciará de aspectos puntuales.

SEMANA: El senador Mauricio Lizcano apoyará a Germán Vargas y otros parlamentarios están buscando a otros precandidatos. ¿Cómo hacer para evitar una desbandada antes de las parlamentarias de marzo?

A.I.: Representaré la decisión adoptada en la convención del partido, a la cual asistieron, legitimando la decisión, más de 2.000 personas, la bancada y las voces de los líderes nacionales y regionales. Algunos parlamentarios están buscando adherir a precandidatos, pero se mantienen en su decisión de presentar sus nombres en la lista de La U. Tienen que tener cuidado porque una de mis funciones es mantener la unidad e integridad del partido.

SEMANA: ¿Y qué pasará con las votaciones de los senadores Elías y Musa Besaile, presos por escándalos de corrupción, que fueron las mayores votaciones del partido en 2014?

A.I.: Como director único del partido tengo que pedirle disculpas al país por ese tipo de circunstancias que se han presentado. No obstante, una cosa es sancionar candidatos y otra muy distinta dejar por fuera sectores políticos que buscan representación. Los votos de esos senadores no me preocupan, pues La U tiene una fuerza regional muy grande.

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SEMANA: Pero esta campaña va a estar enfocada en la lucha contra la corrupción. ¿Cree que sancionar a quienes hayan cometido delitos basta?

A.I.: La corrupción está entre los cinco puntos que más preocupan a los colombianos. Y tener mejores representantes también depende de los electores. Si queremos cambiar, tenemos que sancionar a los corruptos en las urnas. La lucha contra la corrupción es de parte y parte.

SEMANA: La presencia de Roy Barreras y Armando Benedetti en el congreso del Partido Liberal generó expectativas de alianza entre las dos colectividades e incluso la posibilidad de una lista única para el Congreso. ¿Cómo va eso?

A.I.: La presencia de miembros del Partido de la U en la Convención del Partido Liberal fue en calidad de observadores, una figura normal en este tipo de eventos. Por ahora vamos a concentrarnos en nuestra elección a Congreso.

SEMANA: ¿Cuáles son sus cábalas?

A.I.: Mi apuesta es mantener los 21 senadores y los 37 representantes. Para eso queremos que en la lista, además de la mayoría de los parlamentarios actuales, estén personas que tengan un alto potencial electoral y que respondan al llamado y las expectativas que está demandando el pueblo colombiano de sus líderes. La U será la Selección Colombia de los líderes sociales y regionales del país, los que nunca tuvieron espacio en la cancha.

SEMANA: Con un presidente impopular, ¿no cree que posturas como la de Pinzón, que dejó La U este año y tomó distancia del acuerdo de paz, son estratégicas?

A.I.: Más que tomar distancia, Pinzón salió corriendo. Después de siete años en el gobierno, la gente no cree en sus razones para ejercer oposición. Es una estrategia fracasada. Sin embargo, Juan Carlos Pinzón sabe que si quiere volver, las puertas de La U siguen abiertas.

SEMANA: Sin candidato propio, ¿qué tan realista es mantener el partido unido?

A.I.: La U no tiene candidato, pero seguirá siendo el partido mayoritario de Colombia y la fuerza decisoria. Como tal, no puede adherir a precandidatos. Eso que lo hagan los partidos de garaje. Por ahora nuestra fórmula ganadora es ‘Messi’: mes y medio antes de las presidenciales hablaremos del tema, para decidir cuál es la mejor propuesta para los colombianos.

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SEMANA: ¿Si la decisión sobre el candidato también es ideológica, eso implica que el compromiso con la implementación de la paz será un criterio para apoyarlo?

A.I.: Sí, por la obligación y la responsabilidad que tiene el país con la implementación de los acuerdos. El que quiera acabar con los acuerdos no contará con el apoyo del Partido de la U.

SEMANA: ¿Esa afirmación marca distancia de La U con Germán Vargas, quien se ha apartado de algunos aspectos de la implementación?

A.I.: No necesariamente. Yo creo que los candidatos necesitan un poco más de hervor porque a veces patalean hacia la derecha y luego hacia la izquierda. A la mayoría los están asesorando diciéndoles que hay que tomar distancia del gobierno. Desde La U, y como la principal fuerza parlamentaria, emprenderemos estrategias políticas para construir los consensos que requiere el país para su reconciliación.

SEMANA: En 2006, La U defendió la reelección de Álvaro Uribe; en 2010, la elección de Juan Manuel Santos; y en 2014, la reelección presidencial para defender el proceso de paz. ¿Qué significa La U en 2018?

A.I.: Un año después de su creación, La U hizo posible, a través de la reelección del expresidente Uribe, la aplicación de la política de la seguridad democrática. En esa política el funcionario más eficiente fue el ministro de Defensa de ese entonces, Juan Manuel Santos. Fue por eso que en 2010 los colombianos lo eligieron. Por cuenta de la seguridad democrática, las Farc se debilitaron y se sentaron a negociar logrando la paz. Lo que sigue ahora es lograr una buena implementación y promover la convivencia. El país dejó las balas, pero la lengua, los insultos y el populismo se están convirtiendo en las peores armas contra las instituciones, poniendo en riesgo, incluso, la estabilidad del país. La U debe hacer política pensando en la reconciliación.

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SEMANA: Pero el hecho de que La U haya reelegido a Uribe, y elegido y reelegido a Santos, quienes hoy están en extremos opuestos, ¿no es causa de división interna?

A.I.: Es indudable que, por su propia naturaleza, en La U hay diversidad de posiciones políticas. Cada momento de la historia se ha enfrentado con base en los retos exigidos por el país. Para 2018, construiremos sobre la base de la unidad alrededor de los retos de una buena implementación de la paz y los temas ideológicos que ya mencioné.

SEMANA: Por último, usted dijo que estaba feliz de asumir la presidencia del Partido Liberal en la convención del Partido de la U. ¿Cuál fue el motivo de su confusión?

A.I.: No fue un lapsus, fue una estrategia política y un mensaje dirigido a los miembros del partido para llamarlos a la reflexión. El interés superior debe estar en el Partido de la U, no en los otros. Fue un mensaje para los que se dedican a hablar más de las posturas y tesis de los otros partidos, y no del Partido de la U, como es su obligación política. Quiero recordarles a los militantes que aquí hay que hablar es del Partido de la U; los que quieran hablar de otros partidos, que se vayan. Las puertas están abiertas para los que quieran llegar y los que se quieran ir.