Home

Nación

Artículo

Miguel Uribe Turbay. | Foto: Imagen tomada de Facebook

BOGOTÁ

Miguel Uribe sería la mano derecha de Peñalosa

Aunque hizo campaña por Rafael Pardo, el concejal liberal es el más opcionado para asumir la Secretaría de Gobierno, según fuentes cercanas al alcalde electo.

17 de diciembre de 2015

Faltan dos semanas para que Enrique Peñalosa asuma en propiedad la Alcaldía de Bogotá y por estos días, el mandatario electo sigue conformando su equipo de trabajo. Luego de anunciar los primeros nombres que integrarán el gabinete, aún faltan definiciones en algunas de las secretarías más importantes, concretamente la de gobierno.
 
Versiones de personas cercanas a Peñalosa dan cuenta de que el  próximo secretario de Gobierno sería el concejal liberal Miguel Uribe Turbay, uno de los más férreos opositores que tuvo el alcalde Gustavo Petro en el cabildo capitalino.

Estas se incrementaron en las últimas horas, luego de que a Uribe Turbay se le vio en eventos en Barranquilla, Cesar y La Guajira junto al ministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, y el vicepresidente, Germán Vargas Lleras, cuyo partido, Cambio Radical, fue el primero en apoyar la candidatura de Peñalosa.

Se trataba de un evento en el que entregaron 200 viviendas del Programa Casa Ahorro, y la presencia del concejal de Bogotá no pasó inadvertida.

Fuentes consultadas por Semana.com aseguraron que Peñalosa sólo tenía dos candidatos, David Luna y Miguel Turbay. Como se sabe, Luna, ministro de las TIC, ha hecho política con Peñalosa y fue de los primeros en sumarse al llamado ‘Equipo por Bogotá’. Aunque Peñalosa le habría propuesto el cargo, este dijo sentirse cómodo en el ministerio, en el cual lleva siete meses. Por eso el concejal Miguel Uribe se puso en la primera línea de las posibilidades de Peñalosa.

Varios allegados al alcalde electo, sin embargo, advierten que Uribe no estaba en las cuentas por haber acompañado la campaña de Rafael Pardo. Y aunque fue un concejal sobresaliente, su experiencia no era una carta a favor.

Pero Peñalosa no contempla estas dos circunstancias, pues descubrió que Turbay conoce bien el manejo del Concejo y mantiene una buena relación con quienes serán sus integrantes, dos condiciones que llaman la atención y que servirían a la hora de tener gobernabilidad.

A Peñalosa no le molesta la juventud de Uribe, quien tiene 29 años. Por el contrario, ha preferido nombrar en el gabinete personas jóvenes que podrían imprimirle dinamismo. Tampoco le molesta su origen político, pues ha dicho que gobernaría con los mejores, sin importar su partido. Por eso, todo apunta a que el joven concejal sería la mano derecha de Peñalosa en su gobierno que pretende recuperar el rumbo de Bogotá.