Cambio de guardia

El segundo cuatrienio de Álvaro Uribe no será igual al primero. Más que un Presidente sentado sobre una gran popularidad, será un líder político que gobernará con los partidos que lo apoyan. Más que un candidato a la reelección, será un administrador de banderas impopulares, como las reformas económicas. En la agenda temática, la seguridad democrática les abrirá espacio a otros asuntos. Se da por descontado un diálogo con el ELN, y no se descarta un proceso con las Farc. Y en relación con los 'paras', pasó la hora de la desmovilización y llegó la de la reinserción, que puede ser más difícil.

En la transición entre los dos períodos se han producido cambios en el equipo más cercano al despacho del Presidente en Palacio. Salen algunos de los artífices de la gestión en los primeros cuatro años, como Jaime Bermúdez y Juan Lozano. Algunos cargos tendrán que cambiar de perfil y en otros casos los consejeros que quedan asumirán nuevas misiones. Estos serán los cambios en el equipo para un segundo tiempo con grandes desafíos.

Óscar Iván Zuluaga
Consejero para la política social

Llega a reemplazar a Juan Lozano, uno de los asesores más cercanos al Presidente. Zuluaga comparte una doble experiencia como político y empresario. Es economista de la Universidad Javeriana con estudios de posgrado en Inglaterra. Lo acompañará en su labor Cecilia Álvarez, quien llegó a Palacio con José Roberto Arango y fue parte del equipo de Juan Lozano. Antes fue presidente de la siderurgica Acesco y concejal y alcalde (1990-92) de su pueblo natal, Pensilvania, Caldas. Como senador apoyó la reelección de Uribe y fue el gran promotor de la idea de crear un partido uribista. Se consideraba ‘fijo’ para el Ministerio de Protección Social, pero al final Uribe optó por la continuidad de Diego Palacio. Para compensar la pérdida de estatus, se ha hablado de darle a su cargo nivel ministerial.

Zuluaga tendrá que ejercer la secretaría técnica de los consejos de ministros, coordinar todas las relaciones entre ellos y la Presidencia. Igualmente, tendrá que administrar los intereses y las relaciones del sector privado con la Presidencia. Zuluaga tendrá por delante el manejo de los temas de modernización de transporte masivo como el MIO y la reestructuración de muchas empresas quebradas como las Empresas Públicas de Cali y las de Cúcuta.

Jorge Mario Eastman
Consejero de comunicaciones

El hasta ahora viceministro de Defensa reemplazará a Jaime Bermúdez como consejero presidencial encargado de la estrategia de comunicaciones y la imagen del Presidente.
Aunque Eastman no es un experto en opinión pública, tiene a su favor que ya conoce el cargo, pues fue secretario privado de la presidencia de Pastrana y consejero para la modernización del Estado durante la presidencia de Gaviria. Por su perfil, Bermúdez es difícil de reemplazar, e Eastman, de hecho, tiene antecedentes en otros campos. “En el primer gobierno Uribe no tenía ni partido ni estructura política. Por eso tuvo que basar toda su estrategia en el manejo de la opinión. En el segundo período, con la mayoría en el Congreso, necesita más que imagen, manejo político con los nuevos partidos” , explicó a SEMANA Ramón Jimeno, experto en comunicaciones. 

Por la naturaleza del puesto, Eastman será un puente de comunicación con varios sectores. En especial, con los políticos y con los medios. En ambos se le conoce como un hombre amable, franco y conciliador. Su presencia en varios gobiernos le facilita la interlocución con distintos partidos y fuerzas. En el caso de un eventual diálogo con las Farc, Eastman puede jugar un papel clave: domina los temas de defensa y tiene la virtud de la discreción. Además, fue consejero de paz en el proceso de paz con el ELN.

Frank Pearl
Consejero para la reinserción

Estrenará el cargo de consejero para la reinserción. Este colombiano de padre canadiense es desde 2001 uno de los tres presidentes de Valorem (antes Valores Bavaria). El nombramiento de Pearl mata dos pájaros de un solo tiro. Por un lado, le inyecta gestión administrativa y coordinación a un programa que se ha visto desbordado por la realidad (40.000 desmovilizados que tienen que reinsertarse a la vida laboral y económica) y que ha demostrado falta de coordinación. Por otro, crea un puente inmediato de participación del sector empresarial, sin el cual el tema no tiene solución. Pearl tiene el respaldo de gran parte de los empresarios, y excelentes relaciones con la Andi. Antes fue vicepresidente financiero de Ajover, gerente de proyectos en la consultora McKinsey, y trabajó en Dow Química. Sin embargo, no tiene experiencia en el sector público y deberá lidiar las peleas internas de poder que ha generado este espinoso tema. Pearl, economista de la Universidad de los Andes con un MBA del Ivey School of Business en Canadá, tendrá que coordinar un tema en el que participan diversas instancias como el Ministerio de Defensa, Interior, Acción Social, Sena y la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, además de los programas de reinserción de Medellín y Bogotá. La consejería sobre este tema no tiene antecesores, por lo que Pearl tendrá que inventársela y establecer su propia autoridad. Sus grandes desafíos serán contar con un sistema eficaz de seguimiento y ubicación de los reinsertados, y sobre todo, ser el articulador de una política que tenderá a descentralizarse en las regiones. En el corto plazo tendrá que desactivar la bomba de tiempo en la que se han convertido las malas relaciones entre el ministro Sabas Pretelt y el comisionado Restrepo, las cuales han entorpecido la gestión de un tema tan crítico.

Fabio Valencia Cossio
Consejero para la competitividad

No es nuevo en su cargo, pero sí en su misión. Llegó a Palacio como consejero para la competitividad en junio de 2005. Tiene una gran capacidad de gestión y de coordinación, y en parte por ello tiene a cargo temas estratégicos y de negociación como el Plan Puebla-Panamá al que Colombia aspira a integrarse, la carretera Panamericana y la interconexión energética con Centroamérica. Después de la reelección, el ex congresista ha pasado a desempeñar además un nuevo papel. Hoy se le ve lanzando al aire propuestas de régimen parlamentario y acompañando discretamente al Alto Comisionado para la Paz. Se dice que su misión en estos cuatro años será buscar un puente de diálogo con las Farc. Después de tres años de negociar con los paras, Luis Carlos Restrepo encuentra resistencia entre la guerrilla. Valencia Cossio, en cambio, fue negociador en el proceso del Caguán. También fue integrante de la comisión facilitadora con el ELN y hoy el proceso con ese grupo necesita una nueva cara al frente. Sonó para Ministro del Interior, cargo que hubiera preferido, pero podría ser un gran protagonista de los próximos cuatro años, si avanza el proceso con el ELN o si arranca uno con las Farc.

Miguel Peñalosa
Consejero para el seguimiento a la gestión

Reemplazará en agosto a Anny Vásquez, quien estaba a cargo de la coordinación de los consejos comunales y quien viajará a Londres. Peñalosa tiene un perfil netamente técnico. Es un experto en planeación y manejo de presupuesto. Trabajó en la campaña de reelección de Uribe y estuvo a cargo de la logística el día de elecciones. Este ingeniero electricista fue estudiante distinguido y se graduó con honores de la UIS y realizó estudios de posgrado en Monterrey. Aunque nació en Medellín, se crió en Cúcuta y Bucaramanga. Tiene experiencia en la estructuración de concesiones desde exploración petrolera hasta carreteras. Fue presidente de la junta directiva del Grupo Odinsa, una de las empresas más grandes de ingeniería del país y antes de trabajar en la campaña fue vicepresidente de planeación del grupo Ethus. Su misión será el seguimiento de los compromisos adquiridos por el gobierno central con las regiones y asegurar que las promesas se cumplan y los presupuestos se ejecuten. En los próximos cuatro años seguirán los consejos comunales, pero se harán más enfocados hacia temas concretos de acción.