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La pasada administración gastó alrededor de 1.000 millones de pesos en la implementación de ese reversible. | Foto: Archivo particular

BOGOTÁ

Carrera 11: los costosos cambios que desmontó Peñalosa

La polémica y cuantiosa inversión de la administración Petro en señalización, demarcación y la instalación de semáforos llegará a su fin este 4 de febrero.

21 de enero de 2016

Este jueves, la administración de Enrique Peñalosa echó para atrás una polémica medida que en su momento tomó el ahora exalcalde Gustavo Petro: el doble sentido en la carrera 11 entre las calles 100 y 82.

Peñalosa, que había prometido resolver la impresionante congestión derivada de esa fórmula del alcalde Petro, lo hizo y la importante avenida quedará como estuvo por años desde el próximo 4 de febrero.

Pero mientras vuelve a la normalidad y se evalúa si esta nueva disposición da resultado, Semana.com se dio a la tarea de averiguar cuánto gastó el exalcalde Petro en la modificación de movilidad de esta importante ruta en el norte de la capital.

Se trata de un simple ejercicio para comprobar cómo algunas decisiones que terminan siendo reversadas le ocasionan un serio daño al patrimonio por los gastos que conllevan.

Los datos reposan en la dirección de Control y Vigilancia de la Secretaría de Movilidad. Allí advierten que la pasada administración gastó alrededor de 1.000 millones de pesos para la implementación de ese reversible. El dinero se invirtió en la instalación de semáforos y la señalización de la vía. Además en la demarcación y parte del trabajo pedagógico.

A su favor varios expertos de la Secretaría de Movilidad dicen que es necesario evaluar el costo-beneficio ya que algunos elementos, entre ellos los semáforos, serán reutilizados.  
 
Durante el tiempo en que la vía mantuvo el reversible las voces de rechazo nunca cesaron. Las críticas se enfocaron, y con razón, en que mientras el costado occidental permanecía en constante trancón, el oriental permanecía con un tránsito nulo.

El tema generó tal preocupación, que en septiembre pasado el Concejo de Bogotá realizó un debate de control político. Allí el entonces concejal Miguel Uribe, hoy secretario de Gobierno, señaló que por cada carro que circulaba en sentido sur-norte, nueve vehículos lo hacían en el sentido contrario.

Petro, quizá basado en estudios, mantuvo la medida y con ello permaneció el caos. Hay que esperar para ver si la nueva decisión logra dar un giro radical a un problema que tenía desesperados a los miles de ciudadanos que transitan por esta importante vía.