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El ministro Fernando Carrillo (izq) y el senador Jorge Robledo en encontraron en la planaria del Senado. | Foto: Guillermo Torres

POLÍTICA

Carrillo no se retractó frente a Robledo

El ministro del Interior pidió en el Congreso que se destapen los intereses “politiqueros” que estarían detrás de los paros.

Rodrigo Urrego, redactor político de Semana.com
23 de julio de 2013

Como estaba previsto, el senador del Polo Jorge Robledo se encontró cara a cara con quien ha señalado como su "verdugo" en los últimos días, el ministro del Interior, Fernando Carrillo. Se vieron en pleno recinto del Senado en la noche de este martes. Era la primera vez que se encontraban desde cuando el pasado viernes, según el dirigente de la oposición, fue “agredido de forma brutal” por el presidente Juan Manuel Santos y el propio jefe de la cartera de Gobierno.

El pasado viernes 19 de julio, recordó Robledo en la plenaria, el mandatario aseguró tener “información precisa” de que "un senador de la República, que se muestra como el defensor de los campesinos y de la protesta social, lo que quiere es la violencia”. Pero fue el ministro Carrillo quien se atrevió a mencionar públicamente que ese senador corresponde al jefe de la oposición, precisamente el senador Robledo, al pedir que se investigara si estaría comprometido con dos supuestos agitadores que fueron detenidos en Irra (Risaralda), epicentro del más reciente paro minero, donde se bloquearon vías y se incendiaron varias tractomulas.

Tales afirmaciones habían generado la mayor reacción del Polo Democrático durante el gobierno de Juan Manuel Santos. A tal punto, que horas antes de este anunciado cara a cara, la jefe del movimiento, la candidata presidencial Clara Rojas Obregón, no esperó la explicación del Gobierno y le dirigió una carta, casi que con carácter de urgencia, al secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, el mismo que vino a sancionar la Ley de víctimas hace dos años, a denunciarle que en Colombia no hay garantías para desarrollar el ejercicio de oposición política y que, por el contrario, lo que hay son "atropellos" desde el Gobierno.

Robledo se hizo presente en el recinto del Senado pasadas las 4:00 de la tarde. Y lo hizo con aires de victoria. Horas antes de su intervención en la plenaria, al senador del Polo se le atribuyó un triunfo político cuando se conoció la carta de renuncia del embajador de Colombia en Washington, Carlos Urrutia, quien, según palabras de la canciller María Ángela Holguín, obedeció a la intención de no generar un problema político, en una decisión que el presidente Santos calificó como un gesto de gallardía y que el senador del Polo había reclamado desde hace más de un mes cuando lo señaló de haber asesorado una estrategia jurídica en torno a la adquisición de unos terrenos baldíos por el ingenio Riopaila.

Así llegó Robledo a desvirtuar las "evidencias" que había revelado el ministro Carrillo, las cuales calificó de "retorcidas", y "truculentas", que, a su juicio, corresponden a la mayor agresión del Gobierno a la oposición de la que no se tenían antecedentes recientes y que hacía parte de un nuevo complot para acabar definitivamente con el Polo Democrático.

Según le explicó Robledo a la plenaria, las pruebas del Gobierno para relacionar al presidente del Polo en Caldas, Óscar Gutiérrez, al señalarlo como agitador de los paros, violan el debido proceso y la presunción de inocencia, y además son débiles jurídicamente.

Primero, dijo que los jóvenes Juan Camilo Jaramillo y Cristian Salazar, quienes según el Gobierno fueron detenidos con artefactos explosivos y armamento en el paro minero, son líderes universitarios del Polo y fueron retenidos en lo que calificó como una “redada natural” en este tipo de protestas, pero sin armamento. “Por algo un juez los dejó en libertad”.

Y con respecto a los mensajes de texto que se les encontró en los que supuestamente recibían instrucciones de Óscar Gutiérrez, no correspondían a la financiación del paro, como aseguró el Gobierno, sino que obedecían a la apropiación de recursos para el Congreso del Polo y que estos correspondían a una rifa. "Sí, hay partidos que tenemos que financiarnos con rifas".

Además, Robledo dijo que esa comunicación correspondía a una conversación del 9 de julio, días antes del paro minero donde fueron detenidos. "¿Estas son las pruebas? Esto es un auténtico sainete”.   

“El fondo de este sainete tenebroso de régimen policial es que Santos está desesperado, el fracaso del Gobierno es abismal y en los paros es incapaz de resolver el problema y a cambio se inventa una cortina de humo. No nos perdona que hayamos demostrado que sus cifras de restitución de tierras son falsas, que la reforma tributaria era contra las clases medias, o que no eliminó las EPS”, dijo Robledo al sacarle sus recientes batallas.

Roy ataca a Robledo

Antes de que interviniera el ministro, el expresidente del Senado Roy Barreras apareció como el principal defensor del gobierno Santos. Y, en vez de solidarizarse con el senador, le controvirtió su discurso.

Barreras llamó a Robledo el "inteligente y sofista" que pretende presentarse como la víctima de una conspiración "contra el adalid de los campesinos y los mineros, contra el que ha levantado al pueblo colombiano. Esta bien creerse el pavo real de la oposición, pero usted es el jefe de la contradicción”.

A los reclamos de garantías a la oposición, Barreras le recordó a Robledo que no se las está brindado a los disidentes del Polo. "Como así, la tolerancia y la democracia no las aplica en casa el senador Robledo".

También le sacó el escándalo del carrusel de la contratación del gobierno de Samuel Moreno en Bogotá, al recordarle que "se quedó callado ante las evidencias de corrupción", eludió la responsabilidad política que tanto ha reclamado, y había calificado esas denuncias como un complot contra la oposición.

Y así como defiende los derechos de las minorías, Barreras le exigió a Robledo respetar el de la mayoría de colombianos afectados por los bloqueos de las vías. Le dijo directamente que las vías de hecho no van a conducir a resolver los problemas de los sectores en movilización, de los que, dijo, están infiltrados.

"Probablemente usted quiera ser reconocido como el abanderado de todas las causas sociales, pero va a terminar convertido en la voz del desastre. Sus propuestas no le sirven a Colombia. Usted votó contra la ley de víctimas, contra el marco para la paz, no cree en nadie sino en sí mismo. Ayúdenos a sacar este país adelante. Propuestas, más que críticas. Necesitamos la voz de un estadista, no la voz de Kassandra".

Tras las palabras de Roy, el ministro Fernando Carrillo nunca se retractó de los señalamientos a Robledo. Eso sí aclaró que nunca ha imputado acusaciones ni a él ni al Polo Democrático. “Hay una evidencia de que jóvenes incurrieron en actos de violencia. La posición del Gobierno es que se investigue. Está en manos de la Fiscalía. No en manos del poder Ejecutivo. Nunca hubo una imputación de manera directa de mi parte, sólo pedí que se adelantara la investigación”.

Por eso controvirtió las acusaciones de Robledo de qué en Colombia se esté respetando el ejercicio de la oposición. Le recordó que el viernes se reunió con el Polo para reforzar las garantías de seguridad y se avanzó en el empeño de varios reclamos del partido. Le recordó que "este gobierno no chuza ni persigue a la oposición".
 
Carrillo no se retractó

Carrillo también evocó que el Gobierno respeta la protesta social, pero que rechaza los actos de violencia que afectan los derechos del resto de colombianos, pidió contextualizar las protestas sociales, que se están desbordando en actos de violencia, en el marco del proceso de paz. “Hay algunos sectores ilegales y politiqueros que juegan a la inestabilidad (…) Si se quieren tener réditos electorales, que se corra el velo y se diga abiertamente, si son un trampolín político las necesidades de los colombianos que se diga abiertamente”.

Los partidos políticos intervinieron y la Unidad nacional arropó al Gobierno. Los conservadores, en boca de Hernán Andrade, insistieron en que los paros están infiltrados por la guerrilla y por otros intereses. Le dijo a Robledo que hay vídeos en los que los jóvenes detenidos en el paro minero "no eran unos angelitos".

Los liberales prefirieron denunciar que las FARC están traicionando los acuerdos y que están recurriendo a la combinación de todas las formas de lucha, y que una de ellas es a través de la infiltración de las movilizaciones.
 
Sólo el senador el Mira Carlos Baena y el liberal Guillermo García Realpe expresaron su solidaridad con Robledo. Aseguraron que han sido una grave equivocación los señalamientos públicos al senador del Polo, pues conducen a una peligrosa estigmatización.