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Calle de las Carretas con Primera de Badillo en el centro histórico. | Foto: Archivo Particular

AMBIENTE

Cartagena, amenazada por el cambio climático

La ciudad amurallada vivió un represamiento en las calles del centro histórico y barrios periféricos.

17 de septiembre de 2014

Cartagena es una de las ciudades de Colombia más expuestas a los rigores del cambio climático, en especial por la amenaza que significa para esta ciudad el incremento del nivel del mar, fenómeno que, unido con la temporada de lluvias y el impacto del caudal del Canal del Dique sobre la Bahía de Cartagena, hace cada año más difícil controlar los encharcamientos en calles principales del centro histórico y de barrios como Bocagrande y Getsemaní.

Este martes en horas de la tarde la precipitación pluvial alcanzó 28,8 milímetros y aunque no fue la más alta registrada en las ciudades de Colombia, pues ayer en Bucaramanga y Quibdó fue de 100 milímetros, lo que llamó la atención en las redes sociales en Cartagena fue el nivel de represamiento de las aguas lluvias en las calles de la ciudad, en especial en el Centro Histórico, donde los andenes fueron desbordados.

¿Por qué ocurre este fenómeno? En primer lugar, es algo que ocurre en los meses lluviosos, entre septiembre y noviembre, pero además se da ante la coincidencia de otros dos fenómenos: aumento del nivel del mar y fenómenos atmosféricos como la temporada de huracanes, que ocurre entre agosto y noviembre, y aunque los huracanes no tocan tierra colombiana, si resulta afectada por fuertes lluvias y vientos.

Es posible que la medición realizada por  la oficina del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales de Colombia (Ideam) en el aeropuerto Rafael Núñez no sea exacta, porque sólo mide la cantidad de agua lluvia en el aeropuerto, y que en el resto de la ciudad haya sido mayor.

Lo cierto es que lo ocurrido el pasado martes, si bien ocurre todos los años, también, de acuerdo con un estudio del Instituto de Geografía de la Sorbona y el Centro de Investigaciones Oceanográficas e Hidrográficas de la Armada Nacional (CIOH) del año 2007, cada año hay incrementos en el nivel del mar que oscilan entre 2,5 y 5 milímetros, incremento que, en el 2030, habrá alcanzado 5,6 centímetros y en los próximos 100 años, 30 centímetros.

En Cartagena hay sectores en los barrios de Bocagrande, Castillogrande, El Laguito, Centro y Manga, donde el nivel de las calles sobre el nivel del mar es menor a 20 centímetros.

Lo que ocurre en estos meses es que se produce un represamiento producido por el incremento del nivel del mar, que ejerce presión sobre el alcantarillado pluvial y sanitario, los que se desbordan y provocan encharcamiento en las calles. Durante la administración de la alcaldesa Judith Pinedo, la Secretaría de Planeación diseñó con la facultad de Ingeniería un proyecto que no ha podido ser puesto en marcha porque en ese entonces era de 40.000 millones de pesos y cada año costará más controlar las mareas.

Cartagena no es la única ciudad que enfrenta este desafío, en la ciudad de Miami se produce el mismo fenómeno y a corto plazo lo han resuelto bombeando las aguas encharcadas a la bahía, pero el fenómeno se repite porque el crecimiento del nivel del mar es inevitable.  

Cada año que pasa es mayor el número de semanas que algunas zonas del centro y Bocagrande permanecen bajo el agua o donde no desaparecen las lagunas. Es por el incremento en el nivel del mar, sumado a las lluvias y al mayor caudal del canal del dique. El CIOH tiene un estudio de hace más de siete años donde se dice que Bocagrande dentro de unos años volverá a ser una isla.


Plaza de San Pedro en el Centro Histórico, al fondo la Iglesia de San Pedro. A media cuadra de la alcaldía de Cartagena. Foto: archivo particular.