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Napoleón Botache, testigo del caso Colmenares. | Foto: Archivo SEMANA

JUDICIAL

Caso Colmenares: la fijación del fiscal González

Napoleón Botache, quien trabajó con el fiscal, aseguró que este quería demostrar un homicidio.

22 de enero de 2014

Las declaraciones de Napoleón Botache Díaz no dejaron muy bien parado a uno de los fiscales del caso. Y él lo conoce bien, pues además de presentar la teoría que detrás de la muerte de Luis Colmenares había un homicidio, Botache se desempeñó como fiscal de apoyo del fiscal 11 seccional de la unidad de Vida, Antonio Luis González.  

Recordó que él llegó al caso durante unas vacaciones de González y que al regreso del fiscal 11 le dijo que era necesario estudiar hipótesis diferentes a la del asesinato. Aseguró que le comentó la necesidad de verificar si Colmenares se había quitado la vida y estudiar cómo era que la Policía no se había dado cuenta del posible homicidio habiendo un CAI tan cerca del lugar de los hechos. 

“Le dije que no había que descartar el suicidio, que había que seguir investigando esa hipótesis y las otras. Yo planteé una sobre la Policía Nacional porque el CAI estaba muy cerca y había que ver cuál es el papel de la Policía (…) El doctor González no acogió las hipótesis. Tenía una fijación en que había sido un homicidio y que sólo íbamos a trabajar esa hipótesis”, aseguró el testigo que no quiere la familia Colmenares

El testigo, citado por la defensa de Carlos Cárdenas al juicio que se le adelanta al joven por homicidio agravado y soborno, dijo que González se negaba a creer en una teoría diferente a la del homicidio. Aseguró que el fiscal 11 tenía esa “fijación” y que quería demostrarlo como fuera.

“La hipótesis para ese momento era que la señorita Laura Moreno y el joven Carlos Cárdenas habían asesinado al joven Luis Andrés Colmenares (…) era un capricho, me dijo: 'la investigación en contra de la señoritas Laura y Jessy es por el homicidio y no nos ponemos a más'”, indicó. 

Los testigos falsos 

Botache manifestó que una vez el fiscal general, Eduardo Montealegre, decidió retirar el proceso de Laura Moreno y Jessy Quintero al fiscal 11 de la Unidad de Vida Antonio Luis González, y entregárselo a Martha Lucía Zamora, fue cuando al caso comenzaron a llegar testigos. 

“Cuando el señor fiscal general de la Nación decide retirar la investigación del fiscal 11 para entregarlo a la delgada ante la Corte, el doctor González es consciente de que la investigación va con esa falencia (la de no tener vínculo entre el presunto homicidio y los procesados). Entonces me dice nuevamente, porque ya me lo había dicho, que tocaba buscar unos testigos falsos o que tocaba buscar unos testigos, le dije ‘pero si ya lo hemos hecho’, y dijo que tocaba buscarlos como sea”, indicó. 

Para el testigo es claro que no existía ningún vínculo entre el presunto homicidio y las hasta entonces únicas procesadas, Laura y Jessy. Aseguró que esa era la preocupación de González, por lo que ante el pedido del fiscal 11 de conseguir testigos se negó y se apartó del proceso que para ese entonces había pasado a manos Zamora.  

“El martes siguiente me enteré de la captura Carlos Cárdenas en virtud de un testimonio de una persona que se llamaba Wílmer Ayola (…) Aparece el señor en la investigación y con esa declaración se captura a Carlos Cárdenas, posterior a ello la defensa de Laura y Jessy se encontró que Wílmer Ayola estaba trabajando ese día en otro lugar de la ciudad. Luego resultó Jesús Alberto Martínez y luego otro testigo (Jonathan Martínez) ratificando la versión de Wílmer Ayola”, esto en relación a que según Botache, cada vez que se dejaba sin credibilidad lo dicho por un testigo, González buscaba otra persona que apoyara su teoría.

En sus declaraciones Botache también mencionó a Luis Colmenares y Oneida Escobar, padres del joven fallecido. Dijo que a ellos les interesaba que se demostrara que a su hijo lo habían asesinado. “El señor Colmenares padre y la señora Oneida Escobar madre, porque la creencia que ellos tenían era la del homicidio del joven”, dijo.