Magistrado confirma condena contra exfuncionarios del DAS

Cuatro exfuncionarios que ‘chuzaron’ a magistrados, políticos, organizaciones de derechos humanos y periodistas habían apelado la condena de ocho años de prisión.

 

Las 'chuzadas' del desaparecido Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), aquel capítulo oscuro en la historia reciente en Colombia y del que muchos creían habían desaparecido, es un fantasma que ronda aún el espectro judicial.

 

Semana.com conoció en exclusiva la sentencia de la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá del pasado 7 de marzo con la que, con ponencia del magistrado Jairo José Agudelo Parra, se deja en firme la condena a ocho años y siete meses de cárcel contra la exsubdirectora de Análisis del DAS Martha Inés Leal Llanos.

 

También contra la exsubdirectora de Contrainteligencia de ese organismo Jackeline Sandoval Salazar; lo mismo que contra Jorge Armando Rubiano Jiménez, coordinador del Grupo Tecnológico, y Hugo Daney Ortiz García, uno de los agentes encubiertos que participaron en estos episodios. 

 

La ratificación de la condena se derivó de una apelación que los implicados hicieron de la condena proferida el 30 de noviembre del 2012 por la juez tercera penal del circuito. Consideraban que la pena había sido muy alta olvidando, quizá, el daño que habían hecho.

 

En el fallo hay un elemento que llama poderosamente la atención. El juez ordena enviar copia de toda la providencia a la Comisión de Acusaciones de la Cámara para que sea integrada a la investigación que cursa allí contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por las interceptaciones ilegales conocidas como 'chuzadas'.

 

El juez remite copias por considerar que “la acción criminal” del DAS no sólo nació de la cúpula de este organismo, sino que de ello tuvieron conocimiento “los superiores dentro del Ejecutivo”.

 

En el fallo, el togado enfoca su estudio en el daño que estos exfuncionarios le hicieron al país y a las organizaciones de derechos humanos, periodistas y políticos de tendencias contrarias al gobierno de entonces. Para él, en ese caso “se produjo la ejecución de una sistemática concurrencia de hechos delictivos donde se desbordaron todas las facultades legales, cuyo denominador común era el ser contradictores del gobierno de ese entonces, so pretexto de producir inteligencia estratégica".

 

En el fallo se ratifica también lo que otros jueces y autoridades han expresado sobre las oscuras actuaciones del DAS, en especial durante la administración de Jorge Noguera. “Fue utilizado para, más allá de sus funciones connaturales, obtener información privilegiada de magistrados, políticos, periodistas y reconocidos personajes de la oposición, durante el primer período de la Presidencia de Álvaro Uribe Vélez".

 

La condena contra los exfuncionarios del DAS fue por los delitos de violación ilícita de comunicaciones, utilización de equipos transmisores o receptores y abuso de autoridad por acto arbitrario o injusto, "con la finalidad de obtener, procesar y analizar información privada de ONG, periodistas y, en fin, personas con tendencia o ideología discrepante con el presidente de la República, Álvaro Uribe Vélez", indica la sentencia.

 

A propósito de la ratificación de la condena contra Martha Leal, la exfuncionaria terminó su declaración ante los magistrados de la Corte Suprema de Justicia en el proceso contra el exsecretario de la Presidencia Bernardo Moreno.

 

En el interrogatorio la exfuncionaria se volvió a ir contra la exdirectora del DAS María del Pilar Hurtado, quien habría sido artífice de otros capítulos de las ‘chuzadas’. 

 

Dijo que Hurtado la visitó antes de ser detenida, para hablar sobre el proceso judicial que enfrentaba. “Me preguntó cuál era mi estrategia de defensa y qué se nos había preguntado en el interrogatorio. Me pidió no hablar de una información de Piedad Córdoba que se le había dado a Nancy Patricia Gutiérrez”, dijo Leal.

 

Como se sabe, la exsenadora Gutiérrez hizo serios debates sobre la también exsenadora Piedad Córdoba y para ello utilizó información privilegiada del DAS. 

 

“La doctora me manifestó tener una persona amiga que tenía un local en el Centro Comercial donde operaba el noticiero (Noticias Uno), esto con el fin de infiltrar a un funcionario que pudiera identificar las fuentes humanas del periodista Daniell Coronell”, afirmó.