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| Foto: Archivo SEMANA

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Las FARC expulsan a cinco mandos en disidencia

El grupo guerrillero separó a Gentil Duarte, Euclides Mora, John Cuarenta, Giovanny Chuspas y Julián Chollo de sus filas. Uno de ellos era miembro del Estado Mayor y comandante del problemático Frente Primero.

13 de diciembre de 2016

El Amazonas se convirtió en un refugio estratégico para los disidentes de las FARC. Cinco mandos de la organización que operan en la región del Guaviare fueron expulsados del grupo armado.

Como un baldado de agua fría cayó este martes el comunicado de la guerrilla. En él, los miembros del Estado Mayor dejaron constancia del mayor temor que despertó el tiempo de incertidumbre jurídica que rodeó el acuerdo: que aumentaran las disidencias.

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Precisamente el día que la Corte Constitucional terminó de despejar el camino para la implementación de lo pactado en La Habana, las FARC, por otra vía, entregaron los nombres de los cinco jefes guerrilleros que fueron apartados de sus filas.

Gentil Duarte, Euclides Mora, John Cuarenta, Giovanny Chuspas y Julián Chollo fueron separados por "entrar en contradicción" con su línea "político-militar", advierte la organización.

Gentil Duarte, miembro del estado mayor del bloque Oriental, asumió la dirección de lo queda del frente Primero. Arriba.

Pese a que en el documento las FARC no se refieren explícitamente a la situación como un problema de disidencia, hacen un llamado para que "los combatientes que bajo engaño han sido llevados a emprender un camino de aventura sin futuro", "se aparten de la errada decisión que han tomado sus jefes inmediatos y regresen a las filas de las FARC donde serán acogidos por sus camaradas".

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Igual a como ocurrió hace tres meses cuando se hizo pública la disidencia del Frente Primero, las FARC lanzaron duras advertencias a quienes se han apartado de su seno. El camino de la paz "no debe ser obstaculizado por un grupo de insensatos que desconociendo los anhelos de paz (...), se lanzan por el despeñadero de la ambición personal disfrazando sus innobles propósitos tras fraseología de apariencia revolucionaria".

El histórico Frente Primero es uno de los siete ‘frentes madre’ que tiene esa guerrilla. De acuerdo con lo que le explicó Ariel Ávila a Semana.com hace unos meses, esta estructura, que se mueve entre Vaupés, Guaviare y Guanía, era una de las encargadas de reclutar, preparar y enviar tropas a las demás divisiones de la organización.

En agosto, cuando se hizo público el poco interés de esa estructura en acogerse al acuerdo de paz, el Estado Mayor de las FARC puso al frente a un hombre que estuvo durante varios meses en La Habana: Gentil Duarte. El mismo que ahora está en disidencia.

De ‘John 40‘, jefe del frente 7, se sabe que fue un fiel seguidor del ‘Mono Jojoy‘ y además fue el encargado de las finanzas del Bloque Oriental después de la muerte del Negro Acacio.

Las posibilidades de sobrevivencia de una disidencia como la que actualmente se mueve en la zona son escasas. El músculo de un frente depende no sólo del nombre que portan como FARC, sino de su interacción con otras unidades insurgentes que tejen corredores e intercambian recursos e información. Un grupo tan reducido no podría resistir una guerra en las condiciones actuales.