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Cuatro parejas gay se casaron para reclamar del Senado el derecho a constituir familia. | Foto: Daniel Reina

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“Congreso no aceptará el matrimonio gay”: LGBTI

Cuatro parejas gay se casaron para reclamar del Senado el derecho a constituir familia.

15 de abril de 2013

A dos días de que el Senado decida si aprueba el matrimonio entre parejas del mismo sexo, la decisión del presidente del Congreso, Roy Barreras, quien anunció su oposición a que las parejas homosexuales puedan constituir familia, cayó como un baldado de agua fría para la comunidad LGBTI.

Creen que el miércoles el Congreso decidirá que las parejas del mismo sexo tendrán derechos civiles y patrimoniales, pero sus uniones nunca serán consideradas como matrimonio.

Por eso, cuatro parejas decidieron casarse simbólicamente ante notario, y lo hicieron en el Palacio de Justicia, sede de la Corte Constitucional, que en el año 2011 advirtió que las uniones entre parejas del mismo sexo "son familia", según explica la concejala Ángela Lozano.

Pero la posición asumida por el presidente del Congreso, a quien la semana pasada se le descubrió un pacto que había suscrito con una iglesia cristiana, y en la que se comprometió a no legislar a favor del matrimonio gay, fue motivo de rechazo.

Barreras aseguró este lunes que frente a este asunto "opino igual que la mayoría de los colombianos, sí a la unión civil y al respeto por los derechos civiles de la comunidad LGTB pero no al matrimonio y adopción de niños".



Daniel Reina Romero / SEMANA


Para el Comité de Impulso del Matrimonio Igualitario, la posición anunciada por Barreras "va a ser la que adopte el pleno del Senado". "Quieren inventarse una figura llamada 'unión solemne', válida sólo para parejas del mismo sexo". En otras palabras "quieren crear una ley para formalizar la discriminación. A nadie se le ocurriría crear un matrimonio especial parea personas afro o uno para los indígenas, pero los congresistas han decidido crear uno para personas homosexuales, de manera que puedan seguir manteniéndonos aislados y destinados a ser ciudadanos de segunda clase".

Para Angélica Lozano la 'unión solemne' no tiene soporte jurídico y su carácter legal es incierto, lo que generaría confusión en jueces y notarios u generaría obstáculos para que las parejas del mismo sexo puedan acceder a la protección de sus derechos.

Lo que la comunidad gay busca es que sus uniones sean consideradas legalmente como matrimonios y puedan tener los mismos derechos que las parejas heterosexuales tienen cuando se casan. Entre otros el derecho a constituir una familia.

El miércoles el Senado deberá decidir si las uniones entre homosexuales pueden constituir familia, a partir del proyecto de ley que así lo contempla y que fue presentado por Armando Benedetti.

El senador de la U confesó su resignación y cree que el Senado va a negar el proyecto. En consecuencia dice que será la Corte Constitucional la encargada de legislar porque el Congreso fue incapaz de hacerlo. Las parejas homosexuales, según Benedetti, tendrían que recurrir a la tutela para que sea el máximo tribunal constitucional el que decida que sus uniones sí son matrimonios. 

Barreras no presidirá el debate

Tras la tormenta política que se la armó por el pacto con la comunidad cristiana, Roy Barreras no sólo fijó su posición en contra del matrimonio igualitario sino que se marginó de presidir el crucial debate. Su argumento, "brindar garantías al debate". El liberal Guillermo García Realpe, vicepresidente deleznado, será el encargado de dirigir el debate.

Barreas también anunció que intervendrá "para proteger los derechos de las minorías", sin embargo la comunidad LGBTI consideró que con la oposición al título de matrimonio, no está garantizando los derechos de una población minoritaria.

El miércoles, una semana después de que Uruguay se convirtiera en otro de los países del continente en aprobar el matrimonio gay, el turno será para el Congreso colombiano.