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Juan Manuel Santos en Manila. | Foto: SIG

PROCESO DE PAZ

Santos abonó terreno para que la ONU verifique cese al fuego bilateral

El presidente Santos aprovechó su visita en Filipinas para hablar con China y Estados Unidos sobre el papel que la ONU puede jugar para la verificación del cese al fuego bilateral con las FARC.

18 de noviembre de 2015

En su paso por la Cumbre de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), el presidente Santos aseguró inversiones para el país y empujó la decisión de la ONU para lograr que emita un mandato para monitorear y verificar el cese bilateral del fuego con las FARC.

Tres de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas hacen parte de APEC: Estados Unidos, China y Rusia. Santos se reunió con Barack Obama, quien desde el principio ha estado a favor de los diálogos.

También habló con el jefe de estado chino, Xi Jinping, que le confirmó su respaldo. “Me dijo que haría todo lo que fuera necesario para que ese mandato se diera”, dijo Santos. Aunque Vladimir Putin no llegó a Manila por los atentados en Francia, mandó a su primer ministro, Dmitri Medvédev, que también se reunió en privado con el presidente.

Santos le confirmó a Semana.com que hay consenso no sólo entre los cinco miembros permanentes (también están Francia e Inglaterra), sino en toda la ONU para lograr el mandato que permita la verificación del cese al fuego bilateral y definitivo. “Los países miembros me han expresado su total respaldo. Pero el mandato todavía se demora por cuestiones de burocracia y por eso hay que adelantarnos.” Eso sí, quedó claro que eso no se logrará este año. “Ojalá fuera lo más pronto posible, pero no creo que eso pase antes de diciembre”, aseguró el mandatario.

Sin embargo, hay que aclarar que la intervención de la ONU en el cese al fuego bilateral sufre del mismo mal que otras decisiones adoptadas por el gobierno: la unilateralidad. Las FARC ya han dicho que preferirían a UNASUR para esa tarea y la decisión de que la ONU entre a jugar el rol de verificador depende también de la guerrilla. Por eso el presidente ya les pidió a los delegados de La Habana acelerar ese trámite. "Les pedí a los negociadores que hablen con Las FARC y podamos enviar el mensaje porque lo único que necesita Naciones Unidas es que las dos parten soliciten su colaboración.”

Se supone que Santos venía a Manila a hablar de economía. Y aunque lo hizo, era inevitable la pregunta por la paz. Durante la reunión entre la Alianza del Pacífico y APEC, a la que el presidente asistió como observador, el tema central fue cómo empujar los acuerdos comerciales entre las 21 economías asiáticas con México, Chile, Perú y, posiblemente, Colombia.

Con todo y eso, en todas las reuniones bilaterales a las que asistió, la primera pregunta fue por los diálogos. Con el presidente de Filipinas, Benigno Aquino, habló de las diferencias entre los procesos. Mientras en la isla hubo indulto y amnistía para los 6.000 hombres del Frente Moro de Liberación Islámica y la decisión no se sometió a referendo, en Colombia Santos se la juega por el camino difícil: refrendar los acuerdos y asegurar un mínimo de justicia frente a los crímenes cometidos por Las FARC. Ahora que la firma está a cinco meses de distancia, asegurar el apoyo de la ONU es definitivo para el Gobierno. No se sabe si para Las FARC también.