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| Foto: Facebook Alcaldía de Cúcuta

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“Los vamos a ayudar pero no a quedarse acá”: alcalde de Cúcuta

El mandatario César Rojas dice que a su alcaldía no le compete lidiar con la crisis de migrantes. Habló con SEMANA sobre la difícil situación que enfrenta esta ciudad.

11 de febrero de 2018

No comparto que demos desayuno, almuerzo y comida porque ahí sí vendría muchísima gente a vivir acá”. Eso dijo hace un mes César Rojas, alcalde de Cúcuta, la ciudad que más se ha visto afectada por la crisis de migrantes venezolanos en Colombia y que terminó el año pasado con la segunda tasa más alta de desempleo del país.

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Hoy, el mandatario mantiene su posición. Según él, el asunto se salió de control, cada día pasan cerca de 45.000 venezolanos la frontera y unos 2.000 se quedan, y es solo responsabilidad del Gobierno nacional atender las necesidades básicas de estos migrantes, no de su alcaldía.

Le insistió tanto al Gobierno nacional sobre la gravedad del asunto, que el jueves pasado, el presidente Santos visitó la capital de Norte de Santander para tomar nuevas decisiones sobre esta emergencia humanitaria. “Apuntarle a que los venezolanos que llegan a Cúcuta sigan su camino es la salida”, le dijo a Rojas a SEMANA, pues el municipio, según él, no tiene los suficientes recursos para asumir semejante carga.

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SEMANA:¿Cuántos venezolanos se estima que hay en Cúcuta?

CÉSAR ROJAS: En la ciudad de Cúcuta en este momento pueden encontrarse unos 10.000 venezolanos, repartidos en diferentes partes de la ciudad, en los barrios y en las zonas colombovenezolanas. 

SEMANA:¿Más o menos al día cuántas personas cruzan la frontera de Venezuela hacia Colombia?

C.R.: En el conteo que se realiza constantemente pueden estar entrando unas 45.000, 50.000 personas, que pasan por el puente Simón Bolívar. Esto nos da una referencia. Se sabe que 25.000 son venezolanos totalmente y 15.000 son colombianos que viven en Venezuela.

De esos 45.000, salen 42.000. Se quedan unos 3.000 que van hacia el interior del país. Van buscando otros espacios hacia Suramérica. A veces sube más. Por ejemplo, los días lunes ingresan unas 60.000 personas aproximadamente.

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SEMANA: ¿En los últimos meses qué tanto ha aumentado esta cifra?

C.R.:Más o menos se mantiene. En épocas anteriores, donde hubo un mayor éxodo, 90.000 personas ingresaron. Pero usted sabe que fácilmente podrían salir 4 o 5.000 hacia Suramérica. Hoy en día ha venido bajando, pero de todas formas estamos en un promedio de 800, 900 personas que están saliendo para Suramérica.

SEMANA: ¿Cuáles son las principales problemáticas sociales que ha generado el ingreso de venezolanos a diario?

C.R.: Aquellos que se nos quedan en la ciudad, que buscan un espacio laboral y que no lo encuentran por la misma dificultad que nosotros tenemos. Hay muchos quedándose en los parques, en los escenarios deportivos, en las calles durmiendo. Hay otros que ingresan con productos venezolanos a venderlos por los barrios  y cuando está oscureciendo y, como saben que van a cerrar la frontera, de inmediato buscan el espacio para ir saliendo de la ciudad.

SEMANA: ¿Qué opina de las medidas que recién tomó el Gobierno nacional?

C.R.: Como alcalde de la ciudad me parece una medida sana, donde podemos nosotros definitivamente saber cuántos son los venezolanos que ingresan para tener un récord de eso. También es importante que la entrada a Colombia sea ordenada, con su pasaporte.

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Aquellos que tiene la tarjeta de migración fronteriza, que son como 1.600.000, que esas personas puedan ingresar, como dice la tarjeta, pero que no vayan a quedarse aquí viviendo durante meses y meses porque es una tarjeta que les da estadía por seis, siete días y no más.

SEMANA: ¿Esa medida no se contradice con las jornadas de cedulación y registro que están sucediendo acá en Cúcuta?

C.R.:Esas personas que están cedulándose son los que tienen el derecho de sacar la cédula de ciudadanía porque son hijos de colombianos que vivieron en Venezuela, que formaron su hogar en Venezuela o aquellas señoras que son esposas de los colombianos o al contrario. Esa es la gente que se puede cedular.

SEMANA: ¿Cómo ve el panorama de la prostitución de las mujeres venezolanas acá en Cúcuta?

C.R.: Se ha incrementado la presencia de mujeres venezolanas. Vamos a a ver qué tantas de esas mujeres están legales en la ciudad. Y si no pues empezaremos a trabajar con Migración Colombia, para eso se ha creado la modalidad de la Policía Fronteriza que tiene que ver con ese tema.

Eso también nos va a dar una determinación en el tema de quien trabaje en la ciudad de Cúcuta o cualquier ciudad de Colombia es porque tiene los documentos para hacerlo sin ninguna dificultad.  

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SEMANA: ¿Usted se mantiene en la postura de que no se les dé comida gratis a los venezolanos sino solo refugio y albergue?

C.R.: Yo he propuesto que tengamos unos espacios de dormitorio. Creo que la ONU comparte eso. El día de la visita del presidente se tomó la decisión de hacer unos espacios, donde puedan albergarse unas dos mil personas. Pero solamente dormitorio, para quitar esas situaciones que estamos viviendo en los parques, niños durmiendo a la intemperie, mujeres embarazadas durmiendo allí, personas de la tercera edad. Esto lo asume directamente la ONU, no lo asume el Gobierno como tal. Sería solamente para dormir y absolutamente nada más.

SEMANA: ¿No es poco humano que un albergue les exija pasaporte y tiquete para Bogotá u otro país como Ecuador para darles comida?

C.R.: Ese es un hogar de paso. Las instalaciones las dio el alcalde de Villa del Rosario, es un antiguo colegio. El convenio de Cruz Roja y Cancillería es para que esas personas que vienen buscando salir de Venezuela hacia Suramérica, puedan llegar allí, bañarse, estar un día, dos, máximo tres. Pero tienen que llegar con su pasaporte y los pasajes que compren para poder salir hacia el interior del país o hacia otros países de Suramérica. Esa es la finalidad de esos hogares de paso.

SEMANA: ¿Entonces la postura del Gobierno es ayudarles en todo lo posible a los venezolanos que entran acá, que salgan a otros países, pero más bien no acogerlos y que sigan su trayecto hacia otros países?

C.R.: Esa es la finalidad y el objetivo de ese hogar de paso. Diferente a esos que llegan a la ciudad de Cúcuta sin ningún horizonte, sin ninguna documentación y que aparte se aventuran a ir al interior del país sin ningún documento. Son personas totalmente ilegales.

Por eso, el Gobierno nacional va a hacer el registro de todos los venezolanos que están en Colombia para saber a dónde están, para no especular y dar cifras que no tenemos concretas. Esa es la certificación que podrán hacer los venezolanos en las Personerías de los municipios, de las ciudades y la Defensoría del Pueblo. Creo que hay dos meses para que esas personas se registren, eso fue lo que dijo el presidente.

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SEMANA: ¿Qué medidas tiene la Alcaldía de Cúcuta para ayudar a estos venezolanos que llegan a la ciudad para quedarse?

C.R.: Como alcalde no puedo tomar unas decisiones directas. Tengo que acogerme a las directrices que da el Gobierno Nacional, que da Cancillería para poder atender a estos venezolanos. Dentro de mi presupuesto no tengo recursos para poder darles a ellos albergue, ni darles alternativas de alimentación, ni nada.

SEMANA: ¿Qué tan cierto es que ustedes prohibieron que la gente que solía llevarles comida gratis a los venezolanos que se quedaban en el Parque Santander lo siga haciendo?

C.R.: Nosotros no hemos prohibido. Nosotros hemos llamado la atención a aquellas personas que tenían buena voluntad para que lo hicieran a través de unos organismos. Es así como algunos se unieron con la Iglesia católica.

Allí llegaba de todo, personas que viven en los barrios subnormales de la ciudad de Cúcuta a buscar la comida. Y era un espectáculo en las calles de la ciudad. Solamente se les pidió el favor de que lo hiciera regularmente, en algunos sitios de la ciudad de Cúcuta. Eso ya ha venido bajando. Al principio fue el fervor y la solidaridad.  

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