Santos y Maduro ya están reunidos en Quito

Después de tanta espera, los presidentes Juan Manuel Santos y Nicolás Maduro se encontraron en Quito (Ecuador) para tratar de encontrar una solución a la crisis fronteriza.

A un mes de estallar la grave situación, los mandatarios y sus cancilleres se reencontraron este lunes después de las 2:00 p. m. en el Palacio de Carondolet, sede del gobierno ecuatoriano.

"Venimos con la mejor de las voluntades, no va a ser fácil, lo sabemos, pero estamos obligados a que de esta reunión salgan buenas noticias de paz", dijo Maduro a su llegada a Quito.

De su lado, Santos anticipó desde Colombia que viajaba con "las mejores intenciones, pero sin grandes expectativas" y dejó claro que en la reunión iba privilegiar la diplomacia y el diálogo serio, además de la firmeza para defender la dignidad de los colombianos y la soberanía nacional.

Antes de viajar a Quito, el presidente afirmó que el “trato humillante” que han sufrido los colombianos deportados de Venezuela “será uno de los capítulos más tristes de la historia” entre estas dos naciones hermanas.

El mandatario colombiano viajó junto a la canciller, María Ángela Holguín; el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, y el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría. Santos se mostró dispuesto a tratar otros temas que preocupan en la frontera, pero le aclaró al gobierno de Venezuela que no son responsabilidad exclusiva de Colombia.

“Los problemas de la frontera, como el narcotráfico, el contrabando, las bandas criminales, son de los dos países y requieren soluciones conjuntas. Colombia no es culpable de los problemas de Venezuela, ni de los problemas de la frontera. La solución empieza en cada país, se requiere cooperación en la lucha contra el contrabando, las bacrimes, la seguridad y aspectos migratorios”, explicó Santos.

El presidente colombiano recordó que desde hace un mes, cuando se decretó el Estado de sitio en zonas de frontera en el vecino país, Colombia ha exigido que no se maltrate a los deportados, suspender las deportaciones masivas, habilitar un corredor para estudiantes y permitir la reunificación de las familias, condiciones que se han venido cumpliendo. “El estado de sitio no puede servir de excusa para violación de los Derechos Humanos de nuestros compatriotas. (…) Mi prioridad en esta reunión es el respeto a los colombianos, a la soberanía”, dijo Santos.

El mandatario informó que en el mes de crisis fronteriza, 1.645 colombianos han sido deportados y cerca de 17.500 personas han retornado a Colombia. Se mostró confiado en que con el apoyo de los presidentes de Ecuador, Rafael Correa, y Uruguay, Tabaré Vásquez, “la reunión pueda llegar a feliz término”. 

"Mi prioridad para esta reunión es ante todo el respeto a Colombia y a los colombianos, a nuestra soberanía y a los derechos fundamentales de nuestros compatriotas", declaró Santos antes de emprender vuelo.

Con AFP.