De nuevo a prisión

Durante 105 días, el ex director del DAS Jorge Noguera Cotes disfrutó de una polémica libertad -un recurso de hábeas corpus lo había sacado de la cárcel el 23 de marzo último-. El viernes pasado, el fiscal general de la Nación, Mario Iguarán Arana, firmó una providencia que deja claro que el otrora jefe del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) es presunto responsable del delito de concierto para delinquir agravado por su colaboración con los grupos paramilitares de la Costa Atlántica.

En 50 páginas, el fiscal Iguarán resolvió la suerte jurídica de Noguera, quien el viernes por la noche fue recluido en los calabozos de la Fiscalía en Bogotá. Como era de esperarse, el testimonio de Rafael García Torres, ex jefe de informática del DAS, fue pieza fundamental para volver a enviar a prisión a Noguera. García aseveró en la Fiscalía que su ex jefe y ex amigo (Noguera) le dijo en cierta oportunidad que el sujeto José Gélvez Albarracín (alias el 'Canoso') era el enlace entre él y el jefe paramilitar Hernán Giraldo Serna; aseguró que Noguera se enfadó con uno de sus subalternos, Sigifredo Puentes, por haber adelantado un operativo contra Giraldo Serna; expresó que en el DAS se les hacía un seguimiento anormal a sindicalistas y a personas de izquierda y puso como ejemplo el caso de profesor Alfredo Correa de Andreis (asesinado en Barranquilla en 2004); que Noguera entraba en cólera cuando se enteraba de los operativos de la Policía del Magdalena contra los paramilitares; que por orden de Noguera le avisó al jefe paramilitar Nódier Giraldo Giraldo que contra él se había librado una orden de captura con fines de extradición, y que el temible 'Jorge 40' le pidió a Noguera que ayudara para que a un amigo suyo lo nombraran director de Corpamag.

Para el fiscal Iguarán, en general todo lo dicho por Rafael García merece credibilidad, pues está demostrado que el ex jefe de informática del DAS, en efecto, tenía nexos con los paramilitares de la Costa Atlántica y, además, mantenía una relación de amistad de muchos años con Jorge Noguera. Esa amistad y el alto cargo que tenía en el DAS -considera el Fiscal- hicieron que García tuviera acceso a la privilegiada información que, finalmente, les entregó a las autoridades, sobre la probada infiltración de los paramilitares en el DAS.

Por todo esto, concluyó Iguarán,"se infiere que Jorge Aurelio Noguera Cotes se puso al servicio de los intereses de las autodefensas ilegales, y se comprometió de tal forma en la estructura misma de la organización criminal, que de esa forma ayudó a acrecentar, fomentar o promover el poder de ese grupo al margen de la ley".

De la determinación de la Fiscalía, conocida por SEMANA, llama poderosamente la atención un hecho: la facilidad con que descarta que Noguera haya participado en el delito de homicidio respecto de sindicalistas y personas con ideas de izquierda. En sólo 12 renglones, el ente investigador asegura que, con excepción de las denuncias de Rafael García sobre este tema, no hay ninguna otra prueba que comprometa a Noguera con estos asesinatos. También la Fiscalía se abstuvo de asegurar al ex director del DAS por el delito de concusión.

Con la detención de Jorge Noguera se pone, sin duda, un punto alto a la llamada para-política, que últimamente estaba un poco inactiva, tanto en la Corte Suprema como en la Fiscalía. A propósito de la sala penal de la Corte, a partir de este martes habrá importantes decisiones sobre la para-política. Por ejemplo, la vinculación formal de algunos congresistas que ya fueron escuchados en versión libre, y la mirada con lupa a un departamento donde políticos y paramilitares se habrían aliado: Santander.