Declaran legal captura de presuntos implicados en fuga de preso

Luego de 36 horas de haberse presentado la fuga del interno de la cárcel La Picota Alexánder Urrego en el sur de Bogotá, el juez 31 de garantías decretó legal la captura de cuatro personas de una misma familia presuntamente implicadas en el hecho.

La Fiscalía aseguró que Leonardo Ignacio Caballero, Martha Cecilia Alarcón Ramírez, Carlos Arturo Alarcón Ramírez y Juan Sebastián Caballero son las personas que residen en la casa donde se ocultó el vehículo en el que al parecer escapó Urrego, con la ayuda de otros sujetos armados.

Según narró el ente acusador, algunos policías que se encontraban cerca al barrio San José en la localidad Uribe Uribe de Bogotá, lugar donde se presentó el hecho al interior de un centro médico, escucharon el llamado de alerta y emprendieron la búsqueda de una camioneta blanca; al encontrar un automotor con característica similares a la reportadas, se percataron de que en su interior iba un hombre con un pasamontañas y un arma en la mano, con la cual se habrían paso entre los demás vehículos por la Avenida Primero de Mayo.

Más adelante, vieron que la camioneta ingresó al garaje de una casa y que una mujer era la que abría la puerta; para la Fiscalía, se trata de Martha Cecilia Alarcón Ramírez.

Antes de que la entrada de la casa fuera cerrada los uniformados ingresaron a la vivienda en donde encontraron al parecer un arsenal, entre el que había pistolas, un revolver, fusiles, municiones, chalecos y otras prendas vestir, se destaca gabán que podría ser de las personas que aparecen en el video dado a conocer por los medios de comunicación. Algunos de los elementos fueron hallados en el automotor utilizado presuntamente para la fuga de Urrego.

Causa curiosidad que pese a que los hechos se presentaron en una fracción de tiempo muy corta, las personas que iban presuntamente en el interior de la camioneta no fueron capturadas por los policías, como ocurrió con los otros cuatro detenidos, según la Fiscalía se habrían escapado por el patio de la casa.

“Fueron sorprendidos durante la comisión del delito, eran las personas que estaban en la vivienda, porque los que se encontraban en la camioneta la parecer lograron escapar al saltar a otro patio”, dijo la Fiscalía.

La defensa

Según el abogado de la familia, ellos son inocentes de todo, pues su único pecado sería vivir en el segundo piso de un taller de mecánica automotriz, que era administrado por otro familiar y que estaría vinculado con actividades ilícitas.   

La defensa de los cuatro procesados indicó que incluso uno de sus representados, en el momento de los hechos se encontraba descansando en su habitación porque es conductor de taxi en las horas de la noche.

“Leonardo Caballero se encontraba en la casa con su esposa, Martha, y su hijo. No tienen nada que ver con lo que pasa en el primer piso (…) Carlos Arturo se encontraba en su habitación porque conduce un taxi y había llegado a descansar. Se encontraba en chanchas cuando llegaron los oficiales a acordonar el lugar. En medio del susto no leyeron nada no verificaron nada, los señores agentes sólo les solicitaban que colaboraran con la justicia (…) Es claro para la defensa que no se cumplieron los presupuestos para que se pueda predicar que los defendidos fueron capturados en flagrancia”, aseguró.

Durante la audiencia, Juan Sebastián sufrió un percance de salud que debió ser asistido por un enfermero que se encontraba en la sala, mientras acudían al lugar los paramédicos solicitados por el juzgado.

En la noche de este miércoles se espera que la Fiscalía le impute a los cuatro capturados los cargos de fabricación, porte y tráfico de armas de uso privativo de las Fuerzas Militares, y fabricación, porte y tráficos de armas de fuego y municiones. Al igual el ente acusador le solicite al juez que les dicte medida de aseguramiento.

Por información que conduzca al dar con el paradero de Alexánder Urrego, quien habría escapado en otro vehículo diferente a la camioneta incautada, la Policía está ofreciendo $30 millones de recompensa. Sin embargo, el abogado del interno ha dicho que contempla la posibilidad de que detrás de todo esté un secuestro y no una fuga.