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Marcio Natel, representante del consorcio brasileño CGR Doña Juana.

CONTROVERSIA

"Doña Juana ya es nuestro y la nueva audiencia es ilegal"

La reciente adjudicación del millonario negocio del relleno capitalino quedó en entredicho por orden de un juez. Marcio Natel, representante del consorcio que ganó, dice que esto sienta un precedente nefasto para la inversión extranjera y que si esta semana cambian los resultados, no dudará en demandar.

16 de octubre de 2010

SEMANA: ¿Cómo es que hasta hace una semana el consorcio que usted representa tenía en el bolsillo un contrato de 230.000 millones de pesos, y hoy no se sabe el futuro de este negocio?

MARCIO NATEL: Está equivocado. No “teníamos”, tenemos un contrato firmado, con pólizas y plazo. Lo que pasó fue que un juez aceptó una tutela que dice que debe repetirse la audiencia de adjudicación, pero esa tutela no es una decisión final. Hay una segunda instancia, y nosotros ya estamos ejerciendo la defensa del derecho adquirido que tenemos.

SEMANA: Pero este jueves la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaspe) citó para repetir la audiencia de adjudicación, que fue la misma donde unos abogados casi se van a los puños.

M.N.: Estamos tranquilos porque cumplimos con todo. No entendemos qué va a hacer la Alcaldía: ¿entregar dos veces el mismo contrato? Nosotros ya tenemos nuestros derechos, y quien gane otra vez, va a tener derecho también. Eso significa que la ciudad entonces va a pagar 460.000 millones de pesos por un contrato que solo vale 230.000 millones.

SEMANA: ¿Cómo se explica lo que está pasando?

M.N.: Todo es una maniobra jurídica de la gente que perdió y que quiere tumbar la licitación como sea para que declaren el proceso desierto y ahí intentar ganar el contrato, no sé cómo, pero no de una forma legal.

SEMANA: ¿Hay corrupción en este proceso?

M.N.: Yo no sé nada de eso, pero queda un interrogante feo. De verdad que muy feo.

SEMANA: ¿Qué impacto concreto les ha traído esta situación?

M.N.: Que el día que comenzábamos con maquinaria y personal listos nos dicen que ya no se puede. Aceptamos una opción de administrar Doña Juana por tres meses, pues para la ciudad esto sería una emergencia de salud gigantesca. Pero ya los bancos nos pidieron frenar los créditos mientras esto se aclara, pero el mayor impacto es para el país.
SEMANA: ¿Por qué lo dice?

M.N.: Nuestra empresa hace menos de un mes estuvo sentada con el presidente Lula y el presidente Santos en Brasil, acompañando la campaña de conseguir nuevas inversiones. La semana pasada volvimos a coincidir con el presidente Santos en Cartagena, ahí estabamos el ex presidente Cardoso y unos 200 empresarios brasileños, cuando me entró la llamada de que habían tumbado nuestro contrato. Ninguno de los que estaba ahí puede entender cómo un contrato con un ente público, que es un derecho adquirido, en este caso parece que no. No tiene sentido.

SEMANA: ¿Quiere decir que encontró algo diferente a lo que se está ofreciendo del país?

M.N.: El Presidente vende muy bien el país. Con atractivos perfectamente claros, que es similar a lo que pasó en Brasil hace años y trajo un desarrollo muy grande, y creo que va a pasar lo mismo aquí, en Colombia. Pero no se puede amenazar esta confianza por maniobras jurídicas con grupos, quién sabe con qué interés, que afectan esa imagen.

SEMANA: Ustedes son poco conocidos en el país y durante la licitación se especuló que eran un comodín para que otro se llevara el contrato...

M.N.:
El Centro de Gerenciamiento de Residuos Doña Juana, que es como se llama el consorcio nuestro, está compuesto por empresas colombianas, una canadiense y nosotros, que solo en Brasil operamos rellenos que atienden una población de unas 40 millones de personas, prácticamente toda la población de Colombia. Lo que pasa es que nuestra estrategia es actuar de bajo perfil.

SEMANA: ¿Y qué opinión le merece la justicia colombiana?

M.N.: Es tan descabellado todo lo que está pasando que yo creo que esa decisión va a ser tumbada y que nosotros vamos a seguir con nuestro contrato. A nuestro juicio, la orden de realizar nuevamente la audiencia es ilegal, al igual que la forma como la Uaesp pretende darle cumplimiento. Estoy seguro de que tiene que haber gente muy buena en la justicia colombiana. No tengo duda de eso.