Dos tragedias enlutan a la vereda La Montañita

Apenas año y medio de servicio en la Policía llevaban los dos uniformados que murieron tras un ataque de las Farc en la vereda La Montañita, de Caquetá, lugar al que llegaron para atender a una mujer que estaba en trabajo de parto y requirió ser trasladada hasta un centro asistencial para dar a luz.
 
Se trata de los patrulleros Alberto Paz Muñoz y Cristian Adolfo Murillo quienes iban en un vehículo de la institución auxiliando a la futura madre cuando, al parecer en una emboscada, fueron blanco de disparos de fusil y granadas de fragmentación.
 
Paz Muñoz era de San Agustín, Huila, población en la que nació hace ya 25 años. Era profesional en operaciones rurales de la Policía y en su hoja de vida reposaban 18 felicitaciones.
 
Por su parte, Murillo el próximo 3 de septiembre cumpliría 26 años, tenía 16 felicitaciones y era oriundo de La Dorada, Caldas.
 
En el ataque atribuido al frente 15 de las Farc, el mismo que secuestró al periodista francés Roméo Langlois, también falleció una mujer de 63 años que hacia las veces de partera y quien respondía al nombre de Berenice Almanza Cifuentes.
 
La otra víctima del hecho fue el bebé que estaba por nacer y cuya madre, de 18 años y de nombre Marta Yadira Taquiero, recibió tres impactos de bala por lo que permanece interna en la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica Medilaser, de Florencia.
 
Pero ella no fue la única persona que resultó herida en el ataque. De acuerdo con los reportes de las autoridades dos menores de edad, Guillermo y Nelly Avendaño, tienen heridas de arma de fuego. Ambos se encontraban en la casa contra la que se estrelló la patrulla cuando perdió el control por la balacera.
 
Durante un consejo de seguridad que se realizó en el lugar, las autoridades anunciaron una recompensa de hasta 20 millones de pesos para quien entregue información que conduzca a la captura de los responsables del hecho.
 
Pero la tragedia no paró allí ya que al término de dicha reunión un carro de la brigada 12 del Ejército, en el que viajaban soldado profesional Yesid Tovar Cárdenas, adscrito a esa unidad militar, y el patrullero de la Policía Enrique Silvera Padilla, de la escolta del gobernador Víctor Ramírez, se rodó por un abismo. 
 
El accidente se produjo en el sector conocido como Puerto Arango ubicado sobre la vía que de La Montañita conduce a Florencia.