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John Restrepo espera que alguien en el gobierno pida a los Estados Unidos que reduzcan la pena de su hijo. | Foto: Archivo SEMANA

MUNDO

El colombiano sentenciado a cadena perpetua en EE. UU.

Álex Restrepo lleva más de 15 años pidiendo que no le apliquen una pena que no existe en su país.

13 de mayo de 2015

John Restrepo recorre Bogotá de un lado a otro. Pide citas en todas partes, la mayoría infructuosas. Lleva 15 años en las mismas, esperando que alguien oiga su historia. Cuando puede viaja de Medellín, donde vive, a la capital del país para pedir auxilio. Su hijo Álex Restrepo fue extraditado y condenado a cadena perpetua en Estados Unidos. Como se supone que los colombianos no pueden tener en otros países penas que no existan en Colombia, su padre cree que su causa tiene esperanza. “Quiero que el Estado luche por los derechos de mi hijo”, sostiene.

Álex llegó a Estados Unidos a los seis años. Sus hermanos lo describen como “buen charlatán, muy noble, buen hijo”. Juntos crecieron en el estado de Nueva York mientras sus papás sobrevivían con lo que hubiera: lavando platos, haciendo aseo, vendiendo cosas. Pero esa idea del sueño americano se vino a pique el 27 de agosto de 1999.

Según las autoridades norteamericanas, Álex asesinó a un policía de Nueva York en el intento por robar una carnicería en el Bronx. Desde ahí, el joven colombiano que para la fecha no tenía más de 25 años, entró a la lista de los hombres más peligrosos de Estados Unidos.

Álex huyó a Colombia, pero fue capturado posteriormente. En ese momento, se acababa de restablecer la extradición en el país. Había sido prohibida por la Constitución de 1991 y un acto legislativo de 1997 hizo que volviera a entrar en vigor. Así, Restrepo fue uno de los que estrenaron ese mecanismo.

Como no existía un tratado de extradición, las cosas se manejaban por un convenio que decía que "Si el acusado es condenado por los crímenes por los que fue extraditado, las autoridades ejecutivas de EE. UU. no buscarán una sentencia de cadena perpetua. El gobierno de EE. UU. también le asegura a Colombia que si a pesar de esto la autoridad judicial impone cadena perpetua, la autoridad ejecutiva tomará acciones para solicitarle que conmute la sentencia por (un número de) años en prisión".

Pero en el caso de Restrepo no fue así, y una juez de Estados Unidos lo condenó a cadena perpetua.  El caso generó en su momento una aireada controversia política interna y el cruce de varias notas diplomáticas. Entre otras cosas, porque estaba pendiente la extradición de los hermanos Rodríguez Orejuela y de la guerrillera alias 'Sonia', y la situación de Álex Restrepo daba algunos indicios de si Estados Unidos iba a cumplir unas garantías mínimas frente a los colombianos.

En el año 2005, la Corte Suprema a raíz de este caso le pidió al presidente Uribe que hiciera claridad con el gobierno de Estados Unidos sobre los derechos de los colombianos extraditados. "Cometimos un error que ya hemos corregido. Le hemos dado garantías muy fuertes a Colombia para asegurarnos de que esto no vuelva a suceder", dijo en ese momento la vicefiscal para Asuntos Criminales de EE. UU., Mary Lee Warren.

Sin embargo, esa nueva normatividad aplicó para todos los que siguieron después, pero no para Restrepo. El hombre lleva 15 años en diferentes penitenciarias de Estados Unidos. Primero en la cárcel de máxima seguridad de Virginia, luego en la de Marion Illinois, y ahora está en la Louisiana. Su hermano Gabriel cuenta que casi no pueden visitarlo porque las cárceles quedan muy retiradas de Nueva York, pero hacen el esfuerzo de verlo al menos dos veces al año.

Los hijos de Restrepo, que en el momento de su captura tenían uno y dos años, hoy ya son casi mayores de edad. Su hermana, Johanna, cuenta que a pesar de que el colombiano es muy fuerte, siempre que se despiden terminan llorando, pues no saben si podrán regresar.