Home

Nación

Artículo

Hipólito Moreno aceptó los cargos que se le imputaron. | Foto: Daniel Reina

JUSTICIA

El exconcejal Hipólito Moreno se desplomó

En la audiencia de imputación de cargos en su contra el otrora poderoso concejal se declaró culpable.

21 de mayo de 2013

Hipólito Moreno, aquel poderoso expresidente del Concejo de Bogotá por el partido de La U, se desplomó en plena audiencia. La carga probatoria de la Fiscalía en el sentido de que él había direccionado un millonario contrato para la adquisición de ambulancias para Bogotá a cambio de dádivas fue tan contundente, que el excabildante no tuvo más remedio que declararse culpable.

Los delitos que se le imputaron fueron los de interés indebido en la celebración de contratos y cohecho, lo que podría llevarlo tras las rejas por cerca de siete años. “Pido perdón por estos errores y como una muestra de arrepentimiento, estoy colaborando con la justicia”, aseguró Hipólito Moreno al aceptar ante el juez 67 de garantías de Bogotá que participó en el ‘carrusel’ de contratos en la capital del país.   

Atrás quedó el concejal que salió a los medios a desmentir versiones de excontratistas como Julio Gómez y Emilio Tapia, que lo señalaron de haber orquestado la entrega del multimillonario contrato de 67.000 millones de pesos, el 30 de septiembre del 2009, del que recibió el 9 % de comisión. Moreno está involucrado en esas irregularidades con el exsecretario de Salud Héctor Zambrano, quien se encuentra detenido.

“Héctor Zambrano, en su condición de secretario de Salud de Bogotá, buscó asegurar el contrato a la Unión Temporal Transporte Ambulatorio de Bogotá (…) sabía que estaba recibiendo promesa remuneratoria para cumplir actos contrarios a los de su cargo”, señaló el fiscal al referirse a la supuesta complicidad que manejaron los dos funcionarios.

Otro de los que señalaron a Moreno en esa irregularidad fue el excongresista Germán Olano, detenido también por el caso del ‘carrusel’. Lo vinculó por su relación con el empresario Julio Gómez, quien por estos días trabaja en un proceso de colaboración con la justicia.

Luego de esa acusación, Moreno optó por un bajo perfil y decidió incluso no poner su nombre a consideración del electorado en las elecciones pasadas al Concejo. Prefirió seguir adelante con una campaña silenciosa a favor de Felipe Mancera, quien heredó su curul en el cabildo.

¿Quién es Hipólito Moreno?

Hipólito Moreno también habría compartido su capital político en la curul que ganó el representante a la Cámara por Bogotá Wilson Gómez. Tiene, según concejales, cerca de 15 ediles de Bogotá que trabajan para él en las 20 localidades de la capital.

Fue elegido concejal por tres períodos, llegó a ser presidente del cabildo en dos oportunidades y fue uno de los más poderosos de la corporación. En 1998, cuando llegó al Concejo, encontró su primer problema. El entonces concejal Bruno Díaz se fue lanza en ristre en su contra en un debate de control político.

Allí le recordó a Moreno que años atrás, como gerente del Fondo de Ahorro y Vivienda Distrital (Favidi), fue protagonista de hechos irregulares en un programa de 300 casas a orillas del río Bogotá que quedaron a mitad de camino.

Este político, oriundo de Purificación, Tolima, logró en ese entonces agachar la cabeza y no dar la batalla por limpiar su nombre frente a esas denuncias. Nada ocurrió.

En otra oportunidad, su nombre apareció en una demanda de pérdida de investidura en su contra en el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, donde se incluyeron pruebas según las cuales había aportado 10 millones de pesos a la campaña a la Cámara de Representantes de su hermana Araminta Moreno.

Pero las pruebas desaparecieron del listado de aportantes y así Moreno salió indemne de esa investigación. Araminta es la misma que fue fórmula de Samuel Moreno a la Cámara de Representantes por Bogotá cuando Moreno Rojas se lanzó al Senado.

Políticamente, Hipólito Moreno fue uno de los que le dieron manejo a la coalición mayoritaria que acompañó a Samuel Moreno y, tal vez por eso, como dicen sus excompañeros en el Concejo, se acercó a la toma de decisiones en millonarias contrataciones en algunas entidades del Distrito.

Pero todo ese poder llegó a su fin. A Moreno la Fiscalía le pisó los talones y, seguramente, muy pronto estará tras las rejas por haber engañado a los bogotanos.