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| Foto: SEMANA.

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El miedo ronda a los funcionarios judiciales

En el último año han sido asesinados tres jueces. En la actualidad hay más de 700 servidores judiciales amenazados.

23 de marzo de 2011

Parece la misma historia. Un juez fue asesinado a balazos, llevaba varios casos difíciles, las autoridades aseguran que pondrán todo su esfuerzo para dar con los responsables.
El caso de Olga Constanza Gaona, jueza penal del circuito de Saravena (Arauca), indignó. Y recordó otros hechos que han enlutado a la rama judicial. Basta recordar algunas historias registradas el último año.
 
Hernando Patiño Riaño, juez séptimo de ejecución de penas de Soacha (Cundinamarca), fue asesinado a tiros. El lunes 10 de marzo del 2010, cuando salía de su casa a pasear su perro, en el norte de Bogotá, un sicario le disparó. Murió en el mismo instante. No alcanzaron a llevarlo a un centro asistencial.
 
A Diego Fernando Escobar, juez octavo penal municipal de Medellín (Antioquia) con función de control de garantías, también le dispararon. El hecho ocurrió el 22 de abril del 2010 cuando esperaba un taxi que lo llevara a su despacho. Murió en el lugar de los hechos. Tenía 45 años, 19 dedicados a la administración de Justicia.
 
Los hechos los recuerda Nelson Cantillo, presidente de Asonal judicial, para quien la muerte de la jueza Gloria Contanza Gaona, además de indignante e injusta, vuelve a poner sobre la mesa el tema de la poca seguridad con la que, según él, cuentan los funcionarios judiciales.
 
“Cifras oficiales del Consejo Superior de la Judicatura dan cuenta de que hay más de 700 servidores judiciales amenazados”, cuenta Cantillo, quien manifiesta que hoy, varias horas después del asesinato de la jueza Gaona y muchos meses después del crimen de Riaño y Escobar, “hay una sensación de impotencia, de temor. No olvidamos la masacre de La Rochela, cuando mataron a una comisión judicial”.
 
Cifras de la Corporación Fondo de Solidaridad con los Jueces Colombianos (FAsOL), citadas por Cantillo, señalan que desde 1989 hasta lo que va del 2011 se han cometido 287 asesinatos contra funcionarios de la rama judicial, 118 atentados, 39 desaparecidos, 42 secuestrados y 39 exiliados.
 
Fabio Hernández, asesor jurídico de Asonal Judicial, frente al reciente caso de Gaona y al recordar los anteriores, reclamó mayor protección por parte del Estado hacia los funcionarios. Exigencia que se manifestará este viernes cuando fiscalías y juzgados paralicen sus actividades con el ánimo de llamar la atención sobre su situación y analizar los casos de los que han sido víctimas.
 
La impunidad les preocupa mucho. Según el presidente de Asonal Judicial, no se han producido adelantos significativos frente a los casos de sicariato de los que han sido blanco algunos funcionarios judiciales. “Es lamentable. No se sabe cuáles fueron los móviles. En ninguna parte del continente los jueces y fiscales trabajan con todos los riesgos que lo hacemos acá, por eso vamos a solicitar ante al delegado de la ONU en el país unas entrevistas para reflexionar sobre este particular”, señala el jurista.
 
¿Quién puede estar detrás de estas muertes? “Nunca había existido tanta amenazada contra nosotros como las hay ahora, pensamos que pueden surgir de bandas criminales o grupos armados”. ¿Por qué? “Porque está claro que los jueces que más sufren están ubicados en la zonas con mayor presencia de estos grupos: Córdoba, César. Ahí se acentúan con mayor contundencia las amenazas a los funcionarios judiciales”, asegura.