El nuevo 'round' entre Santos y Uribe

El presidente Juan Manuel Santos tuvo este lunes una nueva incomodidad. La Casa de Nariño se vio forzada a emitir un comunicado de prensa en el que responde a los señalamientos del expresidente Álvaro Uribe, quien en un acto público en Mosquera, Cundinamarca, y a través de un trino, insinuó que Santos es socio de proveedores del Ministerio de Defensa.

"Presidente Santos, mis hijos no tienen negocios con el Estado ni yo soy socio de proveedores de Mindefensa. ¿Y usted?", escribió Uribe. 

El escueto comunicado de Presidencia califica como "malévolas" las "insinuaciones del exmandatario sobre los supuestos socios del jefe de Estado.

"La Presidencia informa a la opinión pública que el actual presidente no ha tenido ni tiene vínculo comercial ni societario alguno con proveedores del Ministerio de Defensa ni de ninguna entidad del Estado. Es más, el presidente no tiene socios. Así lo sabe el propio expresidente y por eso no se entiende qué persigue con estos señalamientos", dice la misiva.

Esto no es más que una nueva disputa entre el mandatario y su antecesor. En esta oportunidad fue Santos quien comenzó el rifirrafe, cuando en una intervención en Cesar, dijo: “El único vínculo que tiene uno de mis hijos con el Estado es que está de soldado del Ejército. Ese es el vínculo que tiene mi hijo menor”.

Su declaración produjo la reacción airada de Uribe, quien, por lo general, no demora en responder a quienes han insinuado que mientras él fue presidente de la República, sus hijos Tomás y Jerónimo tuvieron negocios y beneficios por parte del Estado.

En su discurso en Mosquera, Uribe defendió a sus hijos y habló sobre su patrimonio. “Primero, investigarlos (a sus hijos) es muy fácil, porque lo que hacen está a nombre de ellos. No tienen testaferros, de nadie son testaferros. No tienen negocios con el Estado (..) Mi patrimonio, el de mi mujer y el de mis hijos son patrimonios conocidos. Yo tengo una empresa ganadera, unos caballos criollos que vienen de mi abuelo”, aseguró.

El señalamiento de Uribe es del todo grave si se tiene en cuenta que fue hecho por un expresidente, quien tendría que contar con una base sólida para soportar esas graves acusaciones, de lo contrario, y si el presidente Santos llegara a denunciar, Uribe se vería enfrentado a una seria investigación por los delitos de injuria o calumnia.