El polígrafo de Vargas Lleras

En Colombia la prueba del polígrafo es ilegal, por lo menos en lo que tiene que ver con procesos judiciales. De forma reiterada, la Corte Suprema de Justicia ha advertido, en varias sentencias, que la prueba del detector de mentiras carece de toda validez como prueba o evidencia para acusar o exculpar a cualquier procesado. Sin embargo es frecuente que muchos pretendan acudir a ella para demostrar su inocencia, incluso hay quienes llegan con un reporte debajo del brazo, pero los jueces jamás los van a atender.

Sin embargo, no significa que esta prueba sea ilícita. Por el contrario, en Colombia cada vez más crece el número de empresas privadas que aplican este procedimiento como mecanismo de selección y reclutamiento de personal así como para investigaciones internas a los trabajadores. En el primer caso son aceptadas, en el segundo, la utilización del polígrafo es ilícita en cuanto se quiera apropiar como prueba inefable para sancionar o despedir trabajadores.

En el sector público, el polígrafo se ha venido aplicando especialmente al interior de las Fuerzas Militares y la Policía, incluso funcionarios civiles que trabajan en el sector de inteligencia con frecuencia deben someterse a este examen. La esencia del polígrafo es dilucidar si una persona responde con verdades o con mentiras a un extenso cuestionario.

El detector de mentiras, ahora, será estrenado como una herramienta anticorrupción. Así lo dio a conocer el vicepresidente Germán Vargas Lleras. Cerca de un centenar de funcionarios del sector transporte y vivienda, que están involucrados en los procesos de adjudicación y licitación de obras públicas, se someterán a ella, de forma voluntaria.

Vargas Lleras aclaró que aquellos funcionarios que no se sometan a la prueba, serán separados de los procesos de adjudicación. No significa que sean removidos de la entidad.

La medida ya venía siendo aplicada en el sector transporte. Entidades como la Agencia Nacional de Infraestructura – ANI-, Invías, y Aerocivil ya vienen aplicando la medida. Ahora, los funcionarios del sector Vivienda se someterán a ella. “Voluntariamente los funcionarios que quieran intervenir o vayan a intervenir tanto en los procesos de los pliegos de licitaciones, como en la adjudicación, han tomado la decisión de someterse a la prueba de polígrafo (…) es un elemento para buscar transparencia”, dijo el vicepresidente en diálogo con BluRadio.

La prueba no es ilegal, pero sí serían ilícitas algunas decisiones que se adopten con base en la prueba del polígrafo, por ejemplo, si se utiliza información de la esfera de la intimidad en contra del funcionario, o si los resultados son prueba para remover o despedir servidores del cargo.

Según Vargas Lleras serán entre 80 y 100 funcionarios que han decidido someterse de forma voluntaria. Con polígrafo, el vicepresidente pretende que no haya corrupción en la adjudicación de sus proyectos de infraestructura, vivienda y acueductos.