Home

Nación

Artículo

María Concepción Marlaska y Ángel Sánchez llegaron al aeropuerto de Madrid-Barajas poco después de las diez y media de la mañana. | Foto: EFE

NACIÓN

El secuestro de los españoles terminará en boda

"Yo estoy vivo gracias a ella, quiero que todo el mundo lo sepa", dijo Ángel Sánchez en alusión a su novia.

17 de junio de 2013

El secuestro de los españoles María Concepción Marlaska y Ángel Sánchez, en libertad tras casi un mes de cautiverio en manos de delincuentes comunes, tendrá un final feliz porque terminará en boda.

Al finalizar una rueda de prensa en la residencia del embajador de España en Bogotá, Sánchez, de 49 años, aprovechó para declararse a su novia, de 43, con la que tiene una relación desde hace siete años.

"Voy a hacer algo que creí que nunca iba a hacer, y menos en estas circunstancias, que es pedirle matrimonio. Espero que no me diga que no", dijo Sánchez, mientras Marlaska, sorprendida, bromeó, "esto parece un concurso".

"¿Quieres ser mi mujer? ¿Quieres casarte conmigo?", preguntó, y ella respondió con rotundidad: "Sí".

Marlaska reconoció que el secuestro les ha unido "un poco más" porque "es fundamental hacer equipo y sacar toda la fuerza", y recordó que durante todo el tiempo trataron de respaldarse mutuamente para evitar que el otro cayera en un "bajón" de ánimo.

"Yo quería decir una cosa muy importante que quería valorar en público. Yo estoy vivo gracias a ella, quiero que todo el mundo lo sepa, porque si no, me habría vuelto loco", agradeció Sánchez, al recordar las frases de ánimo que se dedicaban.

Sánchez y Marlaska, ambos oriundos de Avilés (Asturias, norte de España), están ansiosos por recuperar su rutina después de esta experiencia que les amargó sus vacaciones por Colombia, un país que soñaban con visitar, según dijeron.

La pareja emprendió el regreso a España este domingo y llegará en la mañana de este lunes al aeropuerto de Barajas.