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Humberto de la Calle, jefe negociador con las FARC; Germán Vargas Lleras, vicepresidente de Colombia | Foto: Fotomontaje SEMANA

ELECCIONES 2018

De la Calle propone coalición por la paz, pero sin Vargas Lleras

El jefe negociador en La Habana dice que el vicepresidente ha mostrado una “gran indiferencia” frente al proceso de paz con las FARC, por lo que de momento no haría política a su lado. ¿Condición inamovible?

13 de febrero de 2017

Humberto de la Calle fue la persona que lideró la primera negociación exitosa con las FARC, por lo menos la única que condujo al grupo guerrillero a dejar medio siglo de lucha armada. Por eso, algunos creen que si el próximo gobierno tiene la misión de implementar los acuerdos de paz, nadie más indicado que el jefe negociador en La Habana para ser el próximo presidente de la República.

Eso es lo que le vienen repitiendo a De la Calle a medida que se aproxima la hora de las decisiones. Aunque faltan 14 meses para la primera vuelta de las elecciones (será el domingo 27 de mayo del 2018), la clase política ya entró en una fase para tomar decisiones. No sólo porque el vicepresidente y los ministros con aspiraciones políticas deben renunciar, también por aquel adagio que dice “al que madruga Dios lo ayuda”. Y es en las toldas del santismo donde más se recomienda “levantarse más temprano”.

Desde cuando se clausuró la Mesa de Negociación en La Habana, De la Calle ha sido hermético y ha logrado evadir cualquier comentario sobre la posibilidad de ser candidato presidencial. Pero este lunes, por primera vez, pareció lanzarse al ruedo, o por lo menos puso su nombre a disposición. Su propuesta es unirse a una gran coalición con quienes votaron por el Sí en el plebiscito del año pasado. Una coalición por la paz que pueda ganar la Presidencia en la primera vuelta.

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En entrevista con el diario El Tiempo, el jefe negociador en La Habana justificó su propuesta en la tesis que el uribismo viene defendiendo en el Congreso durante la implementación de los acuerdos, y es que cualquier futuro gobierno podría derogar las leyes y el alcance del acuerdo con las FARC. El senador José Obdulio Gaviria, incluso, dijo que si el uribismo ganaba las elecciones en el 2018, esa sería de las primeras decisiones de un gobierno del Centro Democrático. “Todos los amigos del proceso tenemos que ponernos en guardia. La amenaza es seria. En lo personal, creo que hay que volver a salir con toda fuerza a defender lo obtenido”, dice en la entrevista.

Sin embargo, su propuesta parece tener una condición: no incluir a Germán Vargas Lleras, el vicepresidente de Juan Manuel Santos.

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Y es que De la Calle, según confiesa, no ve cerradas las puertas a la posibilidad de que el uribismo y Vargas Lleras, a quien califica como poco entusiasta frente a los acuerdos de paz con las FARC, puedan estar en la misma orilla:  

“Pues hasta ahora el doctor Vargas Lleras lo que ha mostrado es una gran indiferencia con el proceso de paz. Por eso hay que insistir en que la coalición para defender la paz tiene que ser coherente y no una repartija electoral mecánica para ganar el poder. Se trata de una cosa seria para garantizar que el desarrollo de los acuerdos, que significan cambios para Colombia, se cumpla”.

En consecuencia, De la Calle piensa en una alianza con otros líderes: Sergio Fajardo, la senadora Claudia López, la ministra Clara López. No habla de partidos y tampoco reclama posiciones jerárquicas. “Yo estoy dispuesto a llevar a cabo la tarea que me corresponda en un esquema de coalición con un liderazgo colectivo”. Pero con ellos aspira algo que parece imposible, ganarle la candidatura de la Unidad Nacional, o del santismo, a Vargas Lleras.  

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Armando Benedetti, presidente del Partido de la U, el que tendrá el reto de mantenerse en el poder en el 2018, reitera que la decisión del movimiento es ir con candidato propio a la primera vuelta, decisión ratificada el pasado viernes en Hato Grande, la hacienda presidencial donde Juan Manuel Santos se reunió a hablar de política con los congresistas de su partido. Posición que difiere a la propuesta de De la Calle.

Sin embargo, eso no significa que una consulta interpartidista para escoger ese candidato de coalición haya quedado descartada. Y según la contempla Benedetti, no tendría ningún veto, ni siquiera al vicepresidente Vargas Lleras, y habría que esperar a cualquier decisión, o guiño, del presidente Santos.

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La entrevista de Humberto de la Calle le confirma al Partido Liberal que el jefe negociador está dispuesto a participar del debate electoral. Puede ser una noticia muy esperada en las toldas del trapo rojo. Pero la condición de una coalición sin Vargas Lleras los podría poner en aprietos, más aún cuando se conocen acercamientos, conversaciones y propuestas entre el jefe natural de Cambio Radical y los líderes liberales, como Simón Gaviria.

De la Calle está dispuesto a lanzarse al agua, pero no lo haría con Vargas Lleras, quien tiene un chance grande de ser el sucesor de Santos. De la Calle vs. Vargas Lleras sería el primer pulso de lo que el país conoce como la Unidad Nacional.

La pelea tendrá consecuencias políticas importantes. Precisamente, como aseguró Humberto de la Calle, porque teóricamente la idea de una coalición se da para atajar a quien ya comenzó con ventaja: Álvaro Uribe. El triunfo del No en el plebiscito casi que asegura su paso a la segunda vuelta, o al menos a quien represente la posición más crítica frente al proceso de paz. 

La coalición que propone De la Calle hoy no se ve probable. Pues candidatos como Claudia López y Sergio Fajardo, quienes tienen unas banderas de rechazo a las opciones de siempre que seguramente serán exitosas, no cederán fácilmente a la propuesta de ser los segundos del jefe negociador. Al interior del Partido Liberal, Juan Fernando Cristo, Luis Fernando Velasco y Juan Manuel Galán también querrían competir por llevar las banderas de ese partido a la Presidencia.

En lo que sí tiene razón De la Calle es en que mientras más divididos estén los candidatos del Sí, incluido Vargas Lleras, más fácil será que los del No les ganen la carrera.