Home

Nación

Artículo

Sonia Verswyvel | Foto: Daniel Reina

CONMEMORACIÓN

"Entendí lo que significa la resilencia"

Era hace diez años una mujer impetuosa, elegante y sonriente. Hoy es la misma persona, pero sobre una silla de ruedas.

2 de febrero de 2013

Entró a la taberna, se sentó a una mesa y ordenó la comida. Luego despertó: estaba en un hospital. Una contusión cerebral le había arrebatado el gusto y el olfato, tenía los pulmones al borde del colapso y la columna fracturada. Recordó que, antes del atentado, su hijo jugaba squash cuando ella se alistaba para cenar. Miró a sus lados, no lo encontró, pero sintió alivio cuando le dijeron que también él había sobrevivido. “Ahí me dije, ¡vamos a seguir adelante!”, dice Sonia Verswyvel, una mujer mayor, maquillada y refinada, que hila conversaciones con facilidad desde la silla de ruedas sobre la que sus piernas paralizadas descansan desde hace una década.


Hoy es la directora de Una Ciudad Para Todos, una iniciativa con la que busca crear consciencia sobre las necesidades de quienes deben andar en silla de ruedas. Sobrevivir a la bomba del Nogal le ha traído muchos aprendizajes. El más importante ha sido entender el significado de la palabra resiliencia. “La aprendí de los psicólogos: para salir de un choque hay que quererse a uno mismo y hacer algo por los demás”. Hablar del club le disgusta pues, según ella, le quitaron el apoyo que recibía. Y a las Farc las perdonó hace tiempos. Pero hay algo de lo que no ha sido capaz. “Con mis hijos nunca he hablado de lo que sucedió”.