Home

Nación

Artículo

| Foto: SEMANA

BOGOTÁ

“Peñalosa va a amarrar a la ciudad por los próximos 40 años": Pacho Santos

El exvicepresidente se declara en oposición a Enrique Peñalosa y a su idea de construir troncal de TransMilenio por la Carrera Séptima. Anuncia que se volverá a lanzar a la Alcaldía. Entrevista.

10 de diciembre de 2017

SEMANA: ¿Cuál es su opinión sobre TransMilenio por la carrera Séptima?

Francisco Santos: La carrera séptima no es un corredor, es una de las vías que hacen parte del corredor del borde oriental de Bogotá. Por allí, entre las calles 26 y 100, se mueven cuatro millones de ciudadanos que viven, trabajan o pasan para ir al centro, sur o norte de capital. Este es un corredor que se tiene que mirar con mucho cuidado y en su conjunto: Avenida Circunvalar, Carrera Séptima, carreras 11 y 13, Avenida 15, troncal de la Caracas y la carrera 16. En un corredor que está desperdiciado para solucionar el problema de largo plazo, más si se ve que la solución que plantea el alcalde Enrique Peñalosa no es la mejor, siendo por lo menos generoso.

SEMANA: ¿Por qué dice eso? 

F.S.: El alcalde Enrique Peñalosa, a quien el Centro Democrático apoyó, al que le pusimos más de 350.000 votos y al que personalmente respaldé, no está presentando una solución integral para Bogotá, que mire hacia el futuro. Él está empeñado en que los ricos montemos en bus, cosa que me parece muy bien si hay un buen sistema, que debe tener como eje central, articulador, una red de metros y no de trocales de TransMilenio. También se le olvida que hay otros que también quieren carro, otros quieren moto, cicla, caminar, en fin, no está mirando el corredor en su integralidad. El centro del debate es que cuál es la ciudad que queremos, urbanísticamente, de movilidad, de futuro. Y en un caso puntual: ¿es TransMilenio la mejor solución para la Séptima o por el contrario la está condenando a un sistema rígido que la va destrozar y comprometer en sus próximos 30 ó 40 años? 

SEMANA: Entonces, ¿usted es enemigo de TransMilenio por la Séptima?

F.S.: Esta no es una discusión entre amigos o enemigos del TransMilenio, con el que estoy de acuerdo para algunos corredores en los que puede funcionar muy bien. Ya vimos lo que le ocurre cuando sobrepasa su capacidad y tratan de ponerlo a trabajar como un metro o un tren. Mi punto es que la Alcaldía no nos está presentando una solución integral, creativa, para el borde oriental, que es donde se hace el mayor número de viajes al día en Bogotá. Por el contrario, tiene una propuesta de movilidad para la Séptima y una, a medias, para la Caracas. Para la primera, piensan gastar 2.4 billones de pesos, de los cuales 300.000 millones son para la compra de predios. Imagínese cómo cambiaría la movilidad en ese borde si se invierte, solo la plata de predios en extender la Circunvalar al norte, hacer puentes y cruces subterráneos en la séptima, la 11-13 y demás vías. Con esa platica se haría mucho, mientras se hace el metro.

Semana: ¿Qué otras soluciones ve usted?

F. S: Se debe diseñar un sistema de transporte masivo integral, con diferentes modalidades. Así lo hayan desechado muy rápido, creo que la idea de un Tranvía en un tramo de la Séptima es una alternativa, como otras. Pero como el cálculo de la Alcaldía es mover por la Séptima 25.000 pasajeros hora, cargándola al máximo con personas que bien podrían ir por los otros corredores del borde oriental, la van a explotar. Esas cuentas de escritorio sirven para meternos el TransMilenio como sea, no como la mejor solución para la ciudad.


Semana: Dicen que el tranvía es muy rígido y que no es una solución...

F. S: Las principales ciudades del mundo, enfocadas en sostenibilidad, están haciendo metros y tranvías, lo que significa que esté último es un sistema que va a evolucionar. ¿Y qué tiene TransMilenio de flexible? Me parece un gran error de esta administración no haber construido sobre lo construido, sobre el metro que se había diseñado. En cambio, decidió inventarse un cuento, porque hasta ahora, que termina no se sabe cómo, en la calle 72. ¿Dónde van a parquear los metros para el regreso? ¿Cómo va a ser el trasbordo? ¿Eso es posible? ¿No será que el día de mañana termina montando los buses artículados por el viaducto de TransMilenio?

Le puede interesar? TransMilenio por la Séptima ¿Mejor para quién?

Semana: ¿Ustedes eran más partidarios de haber mantenido el metro que se diseñó durante Moreno y Petro?

F. S: Si se miran las cifras de hoy, resulta que el metro subterráneo tampoco es más costoso que el elevado. Nos habían hablado de que era tres a uno y resulta que no. Obviamente el problema aquí es práctico y de realidad política. Hay que decirle ya que Bogotá necesita Metro, punto. Y una red de líneas de metro. Eso sí, un metro de verdad, no uno que alimenta a TransMilenio, eso es un error total y un caso único en el mundo.

Semana: ¿Es decir, que usted no está de acuerdo con más troncales de TransMilenio?

F. S: TransMilenio tiene ventajas y es una solución para algunos corredores, pero no lo es para las grandes arterias por donde se mueven la mayoría de bogotanos. Acá la discusión de fondo es cuál es el modelo de ciudad que queremos. Si una, como la troncal de la Séptima, en la que arrasemos todo con tal de hacer meter una troncal que quepa a las buenas o las malas, o una urbanística, técnica, de futuro y bienestar. Es imposible, acá y en cualquier metrópoli del mundo, resolver todas las necesidades de movilidad en la superficie, por eso el metro debe ser subterrráneo. El otro problema es que todos conocemos a qué sabe, huele y cómo funciona TransMilenio; usted no puede invertir 2.5 billones de pesos en la Séptima sin el apoyo de la ciudadanía. 

Semana: ¿Esa idea de que es que son los ricos los que están en contra le caería a usted?

F. S:  Eso es falso, porque he sido amigo de Transmilenio y ha sido una solución, pero está agotado, vencido como eje de movilidad de una ciudad de 8 millones de personas. Tampoco comparto que se haga un metro más barato, no para extenderlo como debió ser, sino para meterle plata a TransMilenio. Eso es absurdo. ¿No se le puede dar un mejor uso a los 28 billones de pesos que va a comprometer Peñalosa en sus troncales? Lo otro que no se entiende es la urgencia de hacer nuevas troncales cuando las que existen ni siquiera están acabadas o hay que volverlas a hacer, como la Caracas. ¿De dónde va a salir esa plata si Peñalosa está comprometiendo los recursos de los próximos 30 años?

Semana: Bueno, ¿la ciudad que usted se imagina cómo sería? 

F. S: Debemos crear un sistema integrado en el que la columna vertebral sea una red de metros. Eso está claro en todos los estudios que se han contratado en los últimos 30 años. Una red subterránea, o elevada donde se pueda, con troncales, buses, tranvías o trenes de cercanías que también hay que hacerlos. Pero vea usted, a Peñalosa tampoco le gustan y no entiendo por qué. ¿En 20, 40 o 50 años los bogotanos se van a mover en buses? O debemos sembrar esos recursos en las soluciones correctas, de largo plazo. El alcalde quiere imponer su visión, en que todo gire en torno a sus bueses rojo, y esa una visión equivocada. 

Semana: Eso es mundo ideal, ¿de dónde sale la plata para hacer varias líneas de metros cuando ni siquiera hay para la primera?

F. S: ¿Están seguros de que no hay plata para esa primera línea? Pero bueno, hay otras posibilidades: APPs, renovación urbana, créditos no a 25 ó 30 años sino al doble o más. Incluso, a través de un acuerdo de gobierno a gobierno, los chinos podrían financiar y hacerla. Ahora bien, la solución no puede ser: cómo no hay plata, arrasemos todo con TrasMilenio, porque como somos pobres, eso es lo que hay. Este no es un debate de ricos o pobres, es un debate en el que se debe mirar la ciudad en su totalidad, no por pedazos o con obsesiones personales.

SEMANA: Pero,  ¿porqué  tanto debate sobre solo una de la troncales y no sobre las demás que se piensan hacer?

F.S.: Porque la Séptima es una vía insigne, importante, que está en la historia y en la vida de todos los bogotanos. Se equivocan quienes quieren mover la discusión técnica, de futuro de ciudad, a un simple debate de ricos contra pobres. Esta polémica, que Peñalosa y su administración están promoviendo, es exactamente lo que hizo Petro, al que tanto critican y señalan. Lo increíble es que hoy se ve que Petro tenía una mirada de ciudad un poco más amplia de la que tiene Peñalosa, así los dos estén equivocados en muchos puntos.

Semana: Si el alcalde Peñalosa ya tomó la decisión de la Séptima y el Concejo la votó, ¿para qué seguir en esta discusión?  

F.S.: Cuando usted se equivoca en un asunto como estos es fatal para el futuro de una ciudad y de sus habitantes. Por el contrario, creo que todavía estamos a tiempo y en el Concejo hay oposición importante a TransMilenio que debe ser atendida. El Concejo tiene que dar el debate. Yo les he dicho a los concejales del Centro Democrático que lo hagan y se opongan a la troncal de la Séptima antes de que la destruyan para siempre. La troncal no cabe, por eso tienen que comprar predios y predios a lo ancho de la vía, va a reducir a dos carriles los carros particulares y el impacto de su obra es tan grande, que va a generar un caos que puede ser hasta peligroso.

Semana: ¿No es un poco irresponsable lo que ha hecho el gobierno, de aprobar proyectos y plata para un metro y otras obras que ni técnica ni jurídicamente están totalmente justificados? 

F. S: Yo sí creo que es muy irresponsable por parte del gobierno nacional haberle soltado toda esa plata sin los estudios. Para alguien que pone el 70 por ciento, creo que ni Planeación Nacional, ni Hacienda, ni ninguna otra entidad del gobierno central han tomado este asunto como debe ser. Si el alcalde no fuera Peñalosa, le aseguro que no tendría ni Conpes.

Semana: Con este tipo de opiniones y críticas, como las que hace, ¿no es mucho más difícil que la administración recapacite o cambio de opinión?

F. S: Seguramente. Yo no sé si el alcalde quiera dar vuelta atrás en muchas cosas. Es muy terco. Que por lo menos quede una constancia histórica frente a lo que va a pasar. Ahora bien, yo sí les pido a todos que abramos un debate de fondo, sin pasiones ni prejuicios. Hay que ser generosos con los bogotanos, oírlos de corazón, innovar y soñar con soluciones que estén garantizadas en el futuro. Que me acusen de lo que quieran, pero yo sí pienso y quiero un modelo de ciudad distinto. 

Semana: ¿No cree que esto es una prolongación, como dicen algunos, del debate político de la pasada campaña?

F. S: No. Para mí es un debate de fondo sobre una ciudad que debe ser muchísimo más amable e innovadora, y no atarla a algo que se hizo hace 20 años y salió mal. Miren Curitiba, que fue la base del gran modelo de Transmilenio: el sistema colapsó y van a hacer otras cosas. También, gran parte de la culpa del colapso en el que estamos hoy es responsabilidad de los alcaldes de izquierda que no hicieron nada de lo que tenían que hacer. Ya era que tuviéramos una línea de metro, una autopista urbana por la Boyacá o entradas y salidas urbanas ágiles. Su falta de acciones sobre la séptima, la 11 y la 13, la 16 y otras vías y corredores, son las que tienen hoy a Bogotá metida en un fango del que ahora nos quiere sacar a la fuerza y a toda prisa, pero con una cuerda atada al cuello.

Sugerimos: Videos: Esta es la ruta del nuevo TransMilenio por la carrera Séptima

Semana: Pero el gobierno les prometió plata y muchas cosas a los gobiernos e izquierda que nunca se materializaron...

F.S.: El problema es que muchos de los que argumentan en contra de la Séptima lo que quieren, realmente, es parar el metro por la Caracas, para volver al modelo de Petro. El metro hay que hacerlo, así sea elevado. La discusión no ideológica, tal y como lo hizo Petro. Esto no es de ricos y pobres, sur o norte. Aquí se trata de construir una ciudad en la que todos quepamos, pero bien. 

Semana: Si le entiendo, ¿su planteamiento sería congelen la Séptima y abran el debate, seamos creativos, y hagamos las avenidas Boyacá y 68?

F. S: Sí, puede ser. Por la Boyacá cabe una autopista urbana, con TransMilenio, a través de una APP. Lo mismo por la 68. Esa una solución, sin mayores costos para la ciudad, mientras en un futuro se hace un metro subterráneo por esas u otras vías, como la ciudad de Cali.

Semana: Todo esto suena un poco a una especie de lanzamiento de candidatura...

F. S: Sí, yo me voy a lanzar otra vez a la Alcaldía, pero de una manera en que no cometamos errores irreversibles. Aprendí, en el gobierno de Uribe, que uno construye sobre lo construido y lo peor son los gobernantes que empiezan a inventar todo, a actuar como si estuvieran en el primer día de la creación. Ahora bien, mis críticas son como bogotano, como alguien que quiere y le duele la ciudad, que piensa en grande. De alguien que no quiere levantar los ánimos para ganar votos.

Recomendamos: TransMilenio por la Séptima, ¿sí es como lo pintan?

Semana: Usted se siente traicionado por Peñalosa.

F. S: Lo primero que le dije cuando ganó las elecciones fue: ‘Enrique, esta ciudad es distinta a la que administró hace 20 años‘, pero creo que eso no le entró a la cabeza. Es más, quien convenció a Peñalosa de que hiciera el metro fui yo, porque a él nunca le ha gustado. Y en campaña habló de un metro y va a hacer otro, que a hoy no tiene estudios serios. En fin, que quede claro que lo que haga Peñalosa es lo que va a amarrar a esta ciudad por los próximos 40 años.