Familia de preso fallecido denuncia "negligencia médica"

La crisis del sistema penitenciario colombiano se agravó esta semana al conocerse la muerte de Miguel Ángel Campos, de 55 años de edad, quien se encontraba preso en la cárcel La Picota de Bogotá.
 
Campos estaba enfermo de los riñones y recibía tratamiento de diálisis permanente. Y, según denunció su familia, falleció por "negligencia médica". Según parientes de Campos, el recluso debió recurrir a una acción de tutela contra el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) para ser operado.
 
Por su parte, el Inpec explicó en un comunicado que Campos había sido trasladado el lunes al hospital Santa Clara, donde falleció el martes de "un shock cardiogénico" cuando salía de una insuficiencia renal crónica.
 
"Campos recibía tratamiento por diabetes mellitus insulinodependiente, para lo cual recibía los medicamentos adecuados", dice el comunicado del Inpec.
 
"Fue llevado el 13 de agosto a control médico y a que le practicaran una hemodiálisis, presentó dolor en el pecho, por lo cual fue hospitalizado para estudio, y posteriormente falleció", agrega el documento.
 
Mientras tanto, los presos en la cárcel Modelo de la ciudad de Cúcuta hicieron protestas durante toda la jornada para impedir la entrada de más prisioneros, e incluso en algunos pabellones algunos reclusos iniciaron una huelga de hambre.
 
Un reciente informe de la Defensoría del Pueblo indicó que en los últimos doce años la población carcelaria creció en 54.915 personas, y que en el mismo periodo solo se crearon 42.009 nuevas plazas penitenciarias, por lo que habría un déficit de 12.906 cupos sumados al hacinamiento anterior.
 
Este miércoles, la ministra de Justicia, Ruth Stella Correa, reconoció que el hacinamiento carcelario es del orden del 47%, por lo cual anunció algunas medidas de choque para atenuarlo.
 
Con información de EFE