Familiares de colombiano condenado a muerte en China piden su repatriación

La familia de Harold Carrillo todavía no entiende en qué momento este caleño de 45 años decidió dejar su profesión de taxista para irse a traficar drogas en China. El drama empezó el 11 de marzo de 2010, cuando Carrillo viajó al país asiático y fue capturado por el tráfico de tres kilos de cocaína.

Desde entonces su esposa y sus hijos no habían tenido noticias de él, pues nunca les dijo a qué país iba. Simplemente informó que se iba a un viaje de negocios. Lo buscaron durante un año y cuando lo encontraron se enteraron de que estaba preso y condenado a pena de muerte en China. Ahora están tocando puertas en la cancillería para lograr su repatriación.

Sostienen que ha sido imposible comunicarse con él debido a las estrictas reglas del gobierno chino. Lo único que saben es que cuenta con dos años para apelar la condena de muerte. Por eso le piden a las autoridades que agilicen los trámites para que pueda pagar por su delito en Colombia.