FARC dinamitan otra torre de energía en Tumaco

El país aún no se repone de la emergencia que ocasionó la voladura de una torre de energía en Buenaventura, Valle, y ahora la guerrilla de las FARC deja sin fluido eléctrico otra ciudad portuaria del Pacífico colombiano.

El nuevo atentado se registró a las 4:00 de la tarde de este martes y afectó el municipio de Tumaco, Nariño, una ciudad donde viven ceca de 200.000 habitantes.

De acuerdo con información suministrada por el comando de la Fuerza de Tarea Pegaso, una unidad del Ejército que ejerce control y brinda seguridad en esa zona del país, la voladura de la torre de energía ocurrió en la vereda Inda Zabaleta y el atentado fue ejecutado por integrantes de la columna móvil Daniel Aldana de las FARC.

“Las tropas adscritas a la Fuerza de Tarea Pegaso realizan operaciones militares de control territorial con el fin de despejar la zona de explosivos, para que los operarios de la empresa de energía puedan ingresar de forma segura a realizar los trabajos y las reparaciones pertinentes”, indicó esa unidad militar a través de un comunicado.

No obstante, el alcalde de Tumaco, Víctor Gallo, aseguró a medios locales que en total son dos las torres derribadas por las FARC.

Por su parte, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, rechazó el ataque y argumentó que Tumaco es un corredor obligado de esa guerrilla para sus actividades de narcotráfico.

En efecto, en menos de una semana ese municipio ha sido objeto de una cadena de atentados que deja el saldo parcial de un policía muerto y tres uniformados heridos.

Esos ataques subversivos hacen parte de la escalada de acciones que vienen ejecutando las FARC desde cuando declararon el fin de la tregua unilateral el pasado 22 de mayo. En respuesta, la Armada y el Ejército capturaron en acciones conjuntas a cinco presuntos integrantes de la red de milicias de las FARC en Tumaco que estarían involucrados en los recientes atentados dentro del casco urbano del municipio.

Con la voladura de la torre de energía en Tumaco ya son dos las ciudades del suroeste del país que sufren apagones -por cuenta de ataques de las FARC- a la infraestructura energética y que afectan a un total de 600.000 habitantes.

El primer caso ocurrió el domingo 31 de mayo cuando el Frente 30 de esa organización subversiva derribó la torre de energía que suministra el servicio a Buenaventura, ocasionó pérdidas millonarias y dejó en tinieblas a 400.000 pobladores.

En el caso de Tumaco la afectación es menor no sólo por el número de pobladores, sino porque justamente en diciembre pasado el Gobierno puso en marcha un plan de choque para atender los apagones por cuenta de atentados. Se trata de la instalación de dos plantas eléctricas que, si bien no suplen el 100 % de la población, sirven para atender la demanda vital de las instituciones de salud, organismos de socorro y otras entidades oficiales.

Por otro lado y a la misma hora del atentado contra la torre de energía en Tumaco, presuntos milicianos de la guerrilla asesinaron a un policía en Cauca.

Así lo informó el coronel Ramiro Pérez, comandante de la Policía en ese departamento, tras asegurar que la acción criminal fue ejecutada por integrantes de las FARC.

El atentado criminal -que se asemeja al denominado “Plan pistola” que viene ejecutando esa guerrilla contra miembros de la fuerza pública en esa región del país- sucedió en el municipio de Miranda, en el norte de Cauca.

De acuerdo con la versión oficial, dos hombres motorizados llegaron hasta la estación policial de esa localidad y dispararon contra un agente que cumplía su turno. Aunque los uniformados reaccionaron y hubo un cruce de disparos, en el ataque no hubo capturados.