Home

Nación

Artículo

FILTRO A LOS CIGARRILLOS

¿Se debe o no restringir la publicidad del tabaco? Un proyecto de ley enciende el debate.

22 de mayo de 1995

ESTE MARTES LA SESION DE la Comisión Quinta del Senado de la República va a estar al rojo vivo. Y curiosamente, no es una citación a un ministro ni un escándalo público lo que se va a debatir en el recinto. Ese día se empezará a definir la suerte de un proyecto de ley que hubiera pasado inadvertido, de no ser por algunos artículos que le podrían traer problemas a la industria tabacalera, a los medios de comunicación y al deporte. Se trata de una propuesta presentada por el senador Mauricio Jaramillo, que pretende reducir la contaminación por el humo del cigarrillo y los índices de consumo de tabaco.
Son pocos los que se oponen a que se dictaminen algunas normas que buscan proteger al no fumador. El hecho de que haya lugares públicos en donde sea prohibido fumar o de que se creen áreas hasta de un 50 por ciento en los establecimientos destinadas para los fumadores, como lo propone el proyecto, tal vez no generará una polémica como la que pueden provocar algunos parágrafos del proyecto que pretenden establecer restricciones publicitarias sobre el tabaco. Palabras más palabras menos, el proyecto busca que se prohiba, a partir de 1996, el patrocinio de cualquier evento deportivo y cultural por parte de la industria tabacalera. Además, habría un horario especial, en radio y televisión, para promocionar las marcas de cigarrillos, mientras que los periódicos y las revistas sólo podrían publicar avisos en páginas interiores y en un tamaño no superior a un cuarto de página.
Sin duda, si se llega a aprobar el proyecto, tanto la empresa tabacalera como los medios de comunicación y el deporte, verían esfumarse millonarios ingresos. En el caso de los fabricantes de cigarrillos, el simple hecho de llevar a su más mínima expresión la promoción de sus productos, bajaría el consumo. Según voceros de este sector, esto podría perjudicar desde el pequeño sembrador de tabaco hasta al comercializador del producto. Por ahora, la industria no ha dado un dato exacto de cuánto podría perder, pero sí es muy enfática al decir que el perjuicio sería grande.
Los otros perdedores serían los medios de comunicación. Según un informe de Infoanálisis, en 1994 la inversión de los tabacaleros en publicidad en televisión, radio, prensa y revistas fue de 22.914 millones de pesos (ver cuadro). Y de llegarse a restringir la pauta publicitaria, esta cifra podría disminuir ostensiblemente. Los medios más perjudicados serían la radio, la prensa y las revistas, ya que en televisión sólo se puede pautar publicidad de cigarrillos después de las 11 de la noche.
Pero el gran campanazo de alerta lo ha dado el deporte. Las inversiones de las empresas productoras de cigarrillo por concepto de patrocinio y publicidad de eventos deportivos es cuantiosa. Según Jorge Correa Pastrana, presidente de la Dimayor, "en el caso específico del fútbol se podría hablar de una inversión de cerca de 3.000 millones de pesos, y si esa cifra se ampliara a otros deportes, estaríamos hablando de por lo menos 5.000 millones de pesos más".

NO ES UNA LOCURA
Aunque a simple vista con estas cifras se podría tumbar el proyecto, la verdad es que la propuesta del senador Jaramillo no se trata de un capricho ni de un simple afán de protagonismo. El congresista tiene razones de peso como para defender su proyecto a capa y espada. De acuerdo con un informe del Centro de Estudios sobre Desarrollo Económico -Cede- de la facultad de economía de la Universidad de los Andes, "en total el exceso de gastos públicos y privados en salud para la atención de enfermedades asociadas al tabaquismo en fumadores y no fumadores se puede calcular anualmente entre 17.739 y 21.366 millones de pesos de 1990 (32.000 y 40.000 millones de pesos de 1993) ". Este informe es corroborado en un estudio del Instituto Nacional de Cancerología que dice que la población fumadora ocasiona gastos al sector salud del orden de los 34.000 millones de pesos al año.
De acuerdo con estas cifras, no es difícil llegar a la conclusión de que el consumo de cigarrillo está ocasionando un serio problema de salud pública en el país. Para Jaramillo el asunto hay que atacarlo de raíz, y además de realizar campañas preventivas en los medios de comunicación es necesario restringir la publicidad del cigarrillo. Para esto el congresista se basa en el mismo estudio del Cede, que establece, mediante una ecuación estadística, que "cada peso de 1990 que se invirtió en publicidad provocó un incremento de nueve cigarrillos en consumo total".
La cifra parece ser contundente, pero para la Asociación Colombiana de Anunciantes -Anda-, la industria tabacalera y la Dimayor, la solución no debe ser tan severa como propone Jaramillo. Darío Múnera, presidente de Coltabaco, piensa que hay una incongruencia cuando se acepta como actividad legal sembrar y producir cigarrillos pero se le ponen limitaciones y trabas a la comercialización de ese producto.
Por su parte, Carlos Delgado, presidente de la Anda, está de acuerdo con que existan algunas limitaciones, como los que están en vigencia, "pero no hay que ser absolutistas. Toda persona que elabore algún producto, tiene todo el derecho de contarle al consumidorque existe. Las comercializadoras del tabaco se han caracterizado por su responsabilidad a la hora de anunciar y hay que resaltar que han sido muy autorreguladoras".
Quizás el sector que más ha atizado la hoguera es el deportivo. Hay quienes dicen que quitarle el patrocinio tabacalero al fútbol profesional sería abrirle el camino a los dineros calientes para que ingresen aún más en este deporte, y en el peor de los casos acabaría con el fútbol. "Esto es absurdo -dice Jaramillo-. Se han jugado 48 torneos de los cuales sólo tres han sido patrocinados por los tabacaleros y estoy seguro que cualqllier otra empresa estaría dispuesta a pagar 3.000 millones de pesos para promocionar el torneo profesional".
El debate está sobre el tapete y hasta el momento no se ha dicho la última palabra. Hay exageraciones de parte y parte y precisamente en eso se está trabajando. La industria, los medios y el deporte se reunieron con el senador Jaramillo para dialogar sobre el tema y en la ponencia del martes se verá en qué se ha avanzado.