Gobierno rechaza que se llame 'capturados' a rehenes de las FARC

"No puedo aceptar que a los militares y policías que fueron secuestrados por las FARC y que están en campos de concentración les digan capturados", afirmó el ministro de Defensa, Rodrigo Rivera, al aludir al término que un grupo de mujeres activistas usaron para referirse a los rehenes en una carta abierta a los insurgentes.
 
El mensaje fue divulgado el jueves por la noche durante un acto por la paz de Colombia celebrado en un edificio del Congreso en Bogotá y está firmado, entre otras líderes latinoamericanas, por la exsenadora colombiana Piedad Córdoba y la Nobel de Paz guatemalteca Rigoberta Menchú.
 
Las activistas invitan a las FARC a que, mientras se dan las condiciones para un diálogo, anuncien "su disposición a la liberación de los restantes miembros de las Fuerzas Armadas y de Policía capturados por ustedes en combate hace varios años".
 
"No son capturados, no son retenidos, son secuestrados en condiciones humillantes, oprobiosas, que violan todas las normas del derecho internacional humanitario", replicó Rivera en una entrevista con la radio bogotana RCN.
 
El funcionario dijo que son las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) las responsables de la crisis humanitaria que el país vive desde hace varias décadas, por lo que les exigió que cesen las acciones terroristas y liberen de inmediato a los secuestrados.
 
Pero la exigencia "no es solamente por nuestros militares y policías. Yo estoy reclamando que ellos den cuentas por más de 200 compatriotas también civiles -mujeres, niños, ancianos- que tienen en su poder y de los cuales no dan ninguna razón desde hace varios años", agregó el titular de Defensa.
 
"No es un favor el que les estamos pidiendo, es una exigencia que los colombianos y la humanidad les hacemos a delincuentes oprobiosos, a terroristas que no pueden tener complacencia ni trato benevolente por parte de ningún ciudadano de bien frente al oprobio del secuestro", enfatizó Rivera.
 
Las FARC, en actividad desde 1964 y con unos 8.000 integrantes, retienen con fines de canje a 18 oficiales y suboficiales de las fuerzas de seguridad, entre ellos un militar cautivo desde diciembre de 1997.
 
EFE