“La cifra sorprenderá al mundo”

Gonzalo Sánchez, director del Centro Nacional de Memoria Histórica, habla con Semana.com sobre el informe que le pone un escabroso número a la desaparición forzada en Colombia.

Semana.com: ¿Cómo entender la cifra de 60.630 desaparecidos?

Gonzalo Sánchez: Es una cifra aterradora, y ni la sociedad, ni la institucionalidad han reaccionado a la desaparición forzada en Colombia. Es una vergüenza porque, siendo una democracia, hemos puesto en evidencia errores que ni siquiera vivieron las dictaduras. Ni la suma de todas las dictaduras del Cono Sur se acerca a la de la desaparición en la democracia colombiana. ¿Cómo es que no lo vimos? ¿Cómo nos pasó de lado y no hicimos nada?

Semana.com: ¿Conoce alguna situación parecida en la historia colombiana?

G.S.: La Unión Patriótica. Todos los días pasaban los muertos en los noticieros y los familiares que los enterraban al otro día aparecían también muertos, y no se hizo nada. Esta sociedad, que no hace nada, nos plantea un interrogante ético muy fuerte.

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Semana.com: ¿Cómo explica que aquí la gente no haya percibido la desaparición?

G.S.: Por el contexto político. Al estar en democracia, a la gente le cuesta aceptar la idea de que una democracia puede ser homicida o desaparecedora. Aunque precisamente esos rasgos democráticos sirvieron de máscara para tapar algunas violaciones. Este delito es incompatible con la democracia, pero aquí convivió y se desarrolló con ella. Esta cifra va a sorprender al mundo.

Semana.com: ¿Cómo llegaron a la cifra?

G.S.: Quisimos una única cifra sustentable porque la diversidad de cifras a veces incompatibles de desaparición que había era un problema. Creamos un observatorio para esclarecer las cifras, recurrimos a 102 fuentes e hicimos un cruce juicioso. Pero no nos quedarnos solo en las cifras. Nos interesan la dimensión, la responsabilidad social, las dinámicas y el diseño de políticas públicas.

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Semana.com: ¿La cifra puede aumentar?

G.S.: Es posible que el posconflicto abra espacios a los cuales no hemos llegado y surja una cifra mayor. La cifra es el punto de partida básico para investigar y para que el Estado asuma su responsabilidad. Colombia tiene un andamiaje institucional para atender la desaparición forzada, pero es descoordinado e ineficaz.

Semana.com: ¿Por qué es tan difícil encontrar desaparecidos?

G.S.: La identificación es una tragedia muy grande. Hay casos que llevan 30 años o más. Lo del Palacio de Justicia pasó en plena capital del país, ha tenido dolientes, prensa y visibilidad y aún no se esclarece del todo. ¿Qué suerte pueden correr los desaparecidos en sitios apartados? Súmele a eso el estigma de buscar un desaparecido que pone a quien lo hace en riesgo de ser asesinado o desaparecido.

Semana.com: ¿Qué espera que pase con este informe?

G.S.: Que logremos desafiar los imaginarios sobre lo que es y no es posible en una democracia. Y que todo el mundo se concientice de lo que pasó, se pregunte qué hizo para detenerlo y asuma las consecuencias. Necesitamos un compromiso para que esto no se vuelva a repetir.